Cierra con tropiezos giras promocionales

La política social gubernamental con "rostro humano" ha ayudado a paliar la pobreza y atenuar la desigualdad, afirmó ayer el Presidente Felipe Calderón.

"No sé qué hubiera sido de la gente más pobre si no hubiera tenido el apoyo solidario de la política social con rostro humano. (...) Estamos cumpliendo con los más pobres, a través de la política con rostro humano del Gobierno federal", sostuvo el Mandatario.

Calderón desahogó ayer, a unas horas del arranque de las campañas proselitistas, un acto con miles de beneficiarios de programas sociales que a la postre resultó deslucido porque al Centro Banamex llegó menos de la mitad de la gente esperada.

Conforme a testimonios recabados entre personal de la Secretaría de Desarrollo Social "la organizadora del acto-, se esperaban unas ocho mil personas, aunque sólo habrán llegado unas cuatro mil; de hecho, varios pendones gigantes fueron descolgados para cubrir los montones de sillas que fueron arrinconados en las esquinas del salón.

Aparentemente, el pesado tránsito que entraba al DF por la autopista de Querétaro dejó varados a cientos de autobuses con el resto de invitados al acto, que de por sí comenzó con un retraso de 45 minutos porque la gente no llegaba.

La oficina de prensa de Los Pinos aclaró que mucha de la gente llegó en el transcurso del evento, aunque al salir se observaron los mismos huecos que se veían antes de que comenzara.

Calderón obsequió un espaldarazo al titular de Desarrollo Social, Heriberto Félix, y a sus antecesores en el cargo, Ernesto Cordero y Beatriz Zavala, "por hacer posible, en mi Gobierno, que se cumplan metas tan anheladas (y que permitan) que la gente más pobre de México haya podido enfrentar y superar los momentos más graves de las crisis internacionales, tanto financiera y la de alimentos".

Además de agradecerle la "oportunidad de servirle" a la patria, Félix Guerra le dijo a Calderón que "dejará un importante legado de política social".

Calderón abrió su mensaje asegurando que, aunque había encontrado "de todo", los mexicanos no piden dádivas ni limosnas, sino apoyos para salir adelante "con su propio esfuerzo y su propia dignidad". En ese tenor, explicó, la cobertura del Programa Oportunidades pasó de cinco a seis punto cinco millones de familias, equivalentes a más de 34 millones de personas.

El Presidente se apoyó en datos del INEGI para sostener que, entre 2000 y 2010, la pobreza extrema no sólo no había aumentado sino que se redujo en un 23 por ciento; en el caso de la desigualdad, disminuyó de un porcentaje de 48 a 43 por ciento.

"Una sociedad solidaria -apuntó Calderón-, es una sociedad a la que aspiramos los gobiernos humanistas".

Calderón entregó el apoyo seis y medio millones de Oportunidades; el dos y medio del Programa 70 y más, y el apoyo del niño un millón atendido en las Estancias Infantiles.


Mayolo López, Reforma, 30 de marzo.