'Vamos a tabasqueñizar la República'

MACUSPANA, Tab.- El sol quema, pero sus paisanos gritan a todo pulmón "¡Obrador! ¡Obrador!" luego de permanecer cuatro horas a mitad del campo de beisbol conocido como "Tumbapatos".

Andrés Manuel López Obrador regresa a su tierra natal para recibir el apapacho de su gente en el arranque de su campaña, 86 días en los que, advierte, se enfrentará al dinero, a los aparatos gubernamentales y a medios de comunicación poderosos.

El sudor le escurre por el rostro. Su camisa blanca luce empapada. La temperatura marca 34 grados centígrados.

"Nunca me olvido de mis orígenes. Llevo prendido en mi corazón a Macuspana, a Tabasco", arranca su discurso.

Abajo del templete, las porras y sonidos de silbatos lo interrumpen, por lo que él pide escuchar su petición: ayudarle a hacer la campaña, porque, argumenta, ante su austeridad sólo queda el pueblo movilizado.

La sombra de 2006 no desaparece. Recrimina una vez más el despojo del triunfo y convoca a hacer campaña juntos, porque él solo, remarca, no podrá solo.

"¿Hacemos el compromiso de que cada uno va a convencer a cinco ciudadanos más, a que tendremos representantes en todas las casillas para evitar que vuelva a suceder lo mismo del 2006?", pregunta a la multitud.

"¡Sí"!, responden sus simpatizantes.

"¿Si saben a lo que estamos enfrentando, verdad?", insiste.

"A la mafia", gritan algunos.

"A un grupo de intereses creados, muy poderoso. Estamos enfrentando al dinero, a los aparatos gubernamentales, a algunos medios de comunicación. Pero, ¿qué tenemos nosotros? Tenemos la razón de que en 2006 quedó de manifiesto que era indispensable el cambio", agrega López Obrador.

Y luego ofrece: "Me comprometo con humildad, me comprometo de manera sincera, que voy a entregar todo mi esfuerzo, mi capacidad como dirigente; que voy a luchar con honestidad por la justicia. Me comprometo a entregar mi corazón por el pueblo de México".

Su voz se le entrecorta y arrecian los aplausos y la lluvia de papel multicolor picado.

"Vamos a tabasqueñizar la República", arenga Arturo Núñez, candidato de la izquierda a la Gubernatura de Tabasco.

Por la mañana, en su conferencia, lucía traje azul oscuro y camisa blanca, pero en el aeropuerto capitalino se quitó saco y corbata.

"Cuando me desperté dije: 'Vámonos, a ganar otra vez'".

Afirma que se siente más seguro que hace seis años, pues ahora cuenta con una red de 3.5 millones de protagonistas.

"Sé que quienes me acompañan están aquí de corazón", expresa con serenidad.


Érika Hernández enviada, Reforma, 31 de marzo.