Denuncian acoso a disidentes

LA HABANA.- A menos de una semana de la visita del Papa Benedicto XVI a Cuba, la Oposición cubana asegura que las autoridades han aumentado la represión al tiempo que ellos arrecian su activismo.

El domingo, alrededor de 60 Damas de Blanco fueron detenidas, y liberadas más tarde, luego de que rebasaran los límites habituales de su recorrido permitido en la capital cubana en protesta por los arrestos ocurridos esa mañana contra una decena de activistas del grupo.

Días antes, disidentes colocaron en aprietos a la jerarquía católica isleña ocupando iglesias en cuatro provincias, hasta ser desalojados contra su voluntad por autoridades religiosas o, como en el caso de La Habana, por la Policía a petición del Cardenal Jaime Ortega.

"Hay una evidente escalada de la tensión. La presencia policial aumentó en todo el país. Quieren calma, no permitirán la menor alteración del orden, y con un nivel represivo de baja intensidad van a impedir cualquier manifestación pública de descontento", declaró a REFORMA Elizardo Sánchez, fundador de la Comisión Cubana de Derechos Humanos (CCDH), quien reportó a otros 12 disidentes detenidos en provincias.

De acuerdo con la agenda oficial, el Pontífice arribará a la oriental Santiago de Cuba el lunes 26, procedente de México, y estará por tres días en el país, concluyendo la visita en La Habana.

Pese a que las Damas solicitaron hablar con Benedicto XVI, todo indica que el Papa no tiene previsto ver a disidentes.

"Somos el sector marginado, el sector que sufrimos, y quisiéramos que el Santo Padre nos escuchara un minuto para decirle que en Cuba hay presos políticos", declaró la vocera del grupo, Berta Soler, quien denunció ayer un recrudecimiento de la represión contra ellas.

La oportunidad mediática del viaje papal y el distanciamiento del Vaticano con la Oposición ha levantado protestas de grupos disidentes, seguidas de rápidas reacciones de control de las autoridades políticas y religiosas.

"Algunos pueden aspirar a que la Iglesia se convierta en el catalizador de cambios radicales en Cuba. Lo importante es que tanto el Gobierno como la Iglesia sepan mantener el diálogo al servicio de la sociedad, sus necesidades y demandas naturales", advirtió Orlando Márquez, vocero del Cardenal Ortega, en la web oficial de la Conferencia Episcopal de Cuba.


Yolanda Martínez corresponsal, Reforma, 20 de marzo.