Montan ceremonia como para la TV

DOLORES HIDALGO.- Fiel a su estilo, Enrique Peña Nieto se convirtió ayer en el candidato presidencial del PRI en un acto montado como si fuera para la televisión.

Desde la noche anterior, el equipo del priista instaló cámaras, grúas y pantallas que hicieron las veces de teleprompter para la lectura de su discurso.

Con los preparativos evitaron cualquier riesgo, pues en los plasmas Peña Nieto incluso podía leer la frase que le sirvió para ser ya el candidato del tricolor.

"Sí, protesto, por la grandeza de México", leyó en grandes letras que fueron proyectadas en decenas de ensayos.

Aunque no es su costumbre, el aspirante llegó puntual al teatro "Mariano Abasolo", justo a las 12:00 horas, como establecía la convocatoria. Arribó acompañado de su esposa e hijos.

Para iniciar el acto, el PRI preparó una "pasarela" de simpatizantes a la que denominó "Sentimientos del pueblo".

Así desfilaron una guanajuatense embarazada, un joven estudiante de Tijuana, un indígena de Oaxaca, una niña de Nezahualcóyotl y una mujer de Nuevo León, que subieron al escenario para hacer peticiones que aprendieron de memoria.

Todos concluyeron su participación con la frase: "Enrique, creo en ti".

El joven de la frontera pidió empleos; el indígena, que se respeten sus derechos, y la niña una mejor educación.

Miriam Solana, de Nuevo León -entidad gobernada por el PRI-, señaló que los ciudadanos viven aterrados por la violencia y la inseguridad.

Gabriela Rodríguez fue la primera en dirigirse al candidato. Con cuatro meses de embarazo, le pidió un sistema de salud de calidad, con doctores profesionales. "No creo que sea mucho pedir. Yo creo en ti, Peña Nieto", le dijo.

Más tarde, en entrevista, la mujer confió en que el PRI haya aprendido la lección de estar 12 años en la oposición, y destacó la importancia de que los aspirantes cuiden su vida personal para evitar polémicas.

"La verdad, de su vida personal no sé mucho, pero creo que como cualquier persona sí te afecta una paternidad que no es responsable. Creo que la vida personal de los candidatos dice mucho", consideró.

En su toma de protesta, Peña Nieto fue acompañado por personajes polémicos del PRI.

Algunos fueron colocados en primera fila y otros hicieron lo posible por no despegarse del mexiquense ni cuando se trasladó hasta la plaza central de Dolores, para colocar una ofrenda floral a Miguel Hidalgo.

El aspirante se fundió en un abrazo con el ex dirigente del PVEM, Jorge Emilio González, quien ha estado envuelto en escándalos por sus fiestas y propiedades en destinos turísticos.

También asistió Roberto Madrazo, el ex candidato presidencial del PRI, que llevó a su partido hasta el tercer lugar en las elecciones de 2006.

La ceremonia, que duró una hora, arrancó con las porras de una batucada mexiquense y concluyó con el Himno Nacional completo, que no todos se sabían, tal y como lo reconoció Luis Videgaray, quien elogió a Manlio Fabio Beltrones por haberlo cantado completo.


Claudia Guerrero y Jorge Escalante, enviada y corresponsal, Reforma, 13 de marzo.