Poco auditorio registraron ayer la carpa y la megapantalla, instaladas por el Frente Amplio Progresista en el Monumento a la Revolución, para seguir el primer foro del debate energético, realizado en el Senado.
A lo largo de siete horas, el local estuvo semivacío, y de las mil sillas colocadas, apenas fueron ocupadas tres decenas por personas que se acercaban, más por la curiosidad que por interés en el debate petrolero.
César Sánchez, trabajador en una empresa de herramientas, aprovechó su hora de descanso para escuchar el debate.
"Quería ver más o menos cómo estaba la situación de la reforma energética y quería oír las propuestas de los senadores", comentó César.
Verónica Zaragoza se enteró que el debate se transmitiría cerca de su trabajo y decidió visitar la carpa.
"Esto que dice ahorita Lorenzo Meyer, la verdad, sí me convence.
"No soy simpatizante de ningún partido, nada más vengo a enterarme", comentó.
Mercedes puso un puesto de tortas a un lado de la carpa. Pero hasta las 14:00 horas había vendido diez.
"Va mal, esperábamos un poquito más de gente y que se vendiera algo", comentó Mercedes, que dijo dedicarse a limpiar casas.
Al terminar el debate, Mercedes dijo que no regresará, dada la escasa afluencia de personas.
Fuentes consultadas informaron que la renta de sillas y carpas por una semana -contratadas con la empresa Del Valle- costará alrededor de 40 mil pesos. El alquiler de megapantallas costará otros 25 mil pesos.
A pesar del escaso auditorio, la carpa volverá a transmitir el segundo foro de mañana jueves. Después será colocada en la plancha del Zócalo capitalino.
A lo largo de siete horas, el local estuvo semivacío, y de las mil sillas colocadas, apenas fueron ocupadas tres decenas por personas que se acercaban, más por la curiosidad que por interés en el debate petrolero.
César Sánchez, trabajador en una empresa de herramientas, aprovechó su hora de descanso para escuchar el debate.
"Quería ver más o menos cómo estaba la situación de la reforma energética y quería oír las propuestas de los senadores", comentó César.
Verónica Zaragoza se enteró que el debate se transmitiría cerca de su trabajo y decidió visitar la carpa.
"Esto que dice ahorita Lorenzo Meyer, la verdad, sí me convence.
"No soy simpatizante de ningún partido, nada más vengo a enterarme", comentó.
Mercedes puso un puesto de tortas a un lado de la carpa. Pero hasta las 14:00 horas había vendido diez.
"Va mal, esperábamos un poquito más de gente y que se vendiera algo", comentó Mercedes, que dijo dedicarse a limpiar casas.
Al terminar el debate, Mercedes dijo que no regresará, dada la escasa afluencia de personas.
Fuentes consultadas informaron que la renta de sillas y carpas por una semana -contratadas con la empresa Del Valle- costará alrededor de 40 mil pesos. El alquiler de megapantallas costará otros 25 mil pesos.
A pesar del escaso auditorio, la carpa volverá a transmitir el segundo foro de mañana jueves. Después será colocada en la plancha del Zócalo capitalino.
Nota de Reforma, 14 de mayo.
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