El doctor Sergio García Ramírez se pronunció ayer contra la reforma energética del presidente Felipe Calderón, la cual -sostuvo- pretende privatizar áreas estratégicas de Pemex, a pesar de los máximos ordenamientos constitucionales.
El ex procurador general de la República señaló que de aprobarse la reforma se dejará en unas cuantas manos del poder público el manejo discrecional de los energéticos del país.
No obstante manifestó que sin una reforma constitucional la propuesta energética de Calderón es jurídicamente inviable. “El texto de la Constitución no es una escritura infranqueable, se puede modificar”, expresó.
Por su parte Miguel Carbonell, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, defendió ayer la iniciativa de reforma energética enviada por el presidente Felipe Calderón al asegurar que en ninguno de sus puntos existe una “inconstitucionalidad directa, palmaria o incontestable”.
El catedrático aseveró que las iniciativas presentadas por el Ejecutivo pueden ser mejoradas e insistió en que son constitucionales porque no comprometen la renta petrolera ni generan derechos sobre el petróleo ni los hidrocarburos.
“Las iniciativas tienen aspectos concretos que son mejorables y que deben ser revisados a fin de evitar su posible confrontación en términos de constitucionalidad; eso puede hacerse en el curso del procedimiento legislativo (…). En sentido general de las iniciativas, no es inconstitucional”, puntualizó.
Ambos juristas participaron en el cuarto debate sobre la reforma energética en el Senado de la República
El ex procurador general de la República señaló que de aprobarse la reforma se dejará en unas cuantas manos del poder público el manejo discrecional de los energéticos del país.
No obstante manifestó que sin una reforma constitucional la propuesta energética de Calderón es jurídicamente inviable. “El texto de la Constitución no es una escritura infranqueable, se puede modificar”, expresó.
Por su parte Miguel Carbonell, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, defendió ayer la iniciativa de reforma energética enviada por el presidente Felipe Calderón al asegurar que en ninguno de sus puntos existe una “inconstitucionalidad directa, palmaria o incontestable”.
El catedrático aseveró que las iniciativas presentadas por el Ejecutivo pueden ser mejoradas e insistió en que son constitucionales porque no comprometen la renta petrolera ni generan derechos sobre el petróleo ni los hidrocarburos.
“Las iniciativas tienen aspectos concretos que son mejorables y que deben ser revisados a fin de evitar su posible confrontación en términos de constitucionalidad; eso puede hacerse en el curso del procedimiento legislativo (…). En sentido general de las iniciativas, no es inconstitucional”, puntualizó.
Ambos juristas participaron en el cuarto debate sobre la reforma energética en el Senado de la República
Nota de Mariana Viayra Ramírez, Crónica, 23 de mayo.
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