Separa migración a madres e hijos

Ya sean las mexicanas que renuncian a sus hijos en México para laborar en Estados Unidos o las que son deportadas de ese país y dejan allá a sus familias, el hecho es que muchas migrantes no podrán celebrar en el Día de las Madres en compañía de sus hijos.

Flor Crisóstomo, por ejemplo, pasará su octavo día de las madres en Chicago, Illinois, sin ver a sus hijos de 14, 12 y 10 años de edad.

Como hace cada tercer día, prenderá hoy su computadora para comunicarse con Josué, Juan Carlos y Paloma, que viven en Guerrero, a través de internet.

En el 2000, en ese entonces de 21 años, optó por dejar su trabajo en un restaurante familiar ubicado sobre la carretera vieja a Acapulco, y emigrar, como hicieron sus dos hermanos, a California.

"Mi niña apenas tenía 2 años y 5 meses de nacida. Fue muy difícil para mí decirle a mi mamá: 'nuestro negocio está muy caído, no tenemos opciones, yo quiero por favor pedirte que cuides a mis hijos, ayúdame, yo te prometo que en poco tiempo voy a regresar'", relata.

"Mi mamá me dijo 'sí mija, no te preocupes, yo cuido a tus hijos, yo voy a ver por ellos, échale ganas, estoy joven y yo te voy a ayudar'".

De acuerdo con la Encuesta de Migración en la Frontera Norte (EMIF), casi 6 de cada 10 mexicanas migrantes viajan a EU sin la compañía de sus familias.

De las 99 mil 681 mujeres mexicanas devueltas por la Patrulla Fronteriza en 2007, más de 26 mil viajaban solas y 31 mil acompañadas por personas que no eran sus familiares.

Según la EMIF, 14 de cada 100 mujeres migrantes son, como Flor, jefas de familia. El 44 por ciento provienen de Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Michoacán y Veracruz y el 49 por ciento son originarias de comunidades rurales.

"En julio del 2000 tomé la decisión de irme a Estados Unidos. Pedí apoyo a un coyote y pase por el desierto. Me llevó como un mes el viaje", comenta Flor.

"Encontré trabajo en Ifco Systems (en Chicago). Estuve ahí desde febrero de 2001 hasta abril de 2006. Un día llegaron agentes de Migración y arrestaron a todos los ilegales".

Desde hace tres meses, como hizo la activista Elvira Arellano, Flor permanece encerrada en un santuario en Chicago, luego de que un juez la sentenciara a salir del país.

Previo a su detención, Flor ya había hecho todo lo necesario para llevar a sus hijos a Chicago, plan del que desistió.

"Ya había juntado el dinero para que me los trajeran. Me los iban a traer unos amigos míos, pero con esto de mi arresto ya no los pude traer", lamenta.



Una valla de por medio

En septiembre de 2007, Eugenia, de 27 años, fue deportada de EU por conducir sin licencia en California.

En su casa en ese país dejó a sus hijos de 9, 8, 3 y 2 años, quienes, al igual que su marido, son ciudadanos estadounidenses.

El año pasado, un promedio de 273 mexicanas al día fueron devueltas por la Patrulla Fronteriza. Sólo 49 por ciento regresaron en compañía de sus familiares.

Actualmente, Eugenia reside en Tijuana, a donde la visitan sus hijos cuando tienen "fin de semana largo".

"Es un poco difícil porque no nos miramos seguido, se desunió la familia, pero eso no nos impide mirarnos", señala.

Voluntarias del albergue "Elvira", Eugenia se hace a la idea de establecerse en la ciudad fronteriza y ha empezado a estudiar la secundaria.

"Quiero agarrar mi certificado en inglés para poder ejercer una carrera", explica.



Reencuentro

Hace apenas mes y medio, Laura se reencontró con dos de sus seis hijos, a quienes dejó de ver desde 1999, cuando salió de Zacatecas para irse a Estados Unidos.

"Ahorita no los conozco, ni sé ni como tratarlos. Los mejores años los dejé solos. Yo me vine para que ellos tuvieran un futuro mejor", señala la mujer indocumentada.

"Aquí conocí a mi esposo, y luego luego él se hizo responsable de ellos. Como él sí puede ir a México, cada año los visita. A veces siento que le tienen más confianza a él que a mi", relata.

En 2004, fue detenida por haber admitido, durante su cita para obtener la residencia legal en EU, que alguna vez fue detenida por agentes de migración.

"Me metieron en la cárcel, ahí me tuvieron 22 días. Me iban a deportar, pero no lo hicieron porque mis hijas estaban enfermas", relata.

"Estoy en supervisión y voy a firmar cada mes, hasta que decidan si me van a dejar aquí o me van a deportar", agrega.

Un informe del Consejo Nacional de la Raza (NCLR, por sus siglas en inglés), señala que por cada dos personas detenidas en las redadas un niño se queda sin familia.

Dos tercios de esos niños son ciudadanos estadounidenses, y una proporción similar corresponde a menores de 10 años.




Del otro lado

Algunas características sociodemográficas de las mujeres nacidas en México y radicadas en Estados Unidos:

4.5 millones de mexicanas radican en EU
28% tiene entre 18 y 29 años
30% otras edades
42% tiene entre 30 y 44 años


· 76% no cuenta con ciudadanía estadounidense
· 46% de las mayores de edad cuenta con empleo
· 368 dólares a la semana es su sueldo promedio
· 59% tiene escolaridad menor a la secundaria
· 51% no tiene seguro social
· 67% está casada
· 346 mil tuvieron un hijo en 2006
· 34% de ellas son madres solteras
Nota de Silvia Garduño, La Jornada, 10 de mayo.

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