CHIHUAHUA, Chih.— Gobernadores electos y el presidente Felipe Calderón firmaron el Acuerdo de Chihuahua, pacto anticrimen que establece 12 compromisos de hasta seis meses para formar unidades antisecuestro y apoyar la policía de mando único, entre otros aspectos como combatir coordinados delitos como extorsión, plagio y homicidio.
Calderón celebró el establecimiento del pacto con plazos perentorios, mismos que serán vigilados en su cumplimiento por testigos sociales.
El convenio se estableció con 12 gobiernos estatales, aunque a la firma sólo asistieron los de Chihuahua, César Duarte; Durango, Jorge Herrera; Zacatecas, Miguel Alonso Reyes; Oaxaca, Gabino Cué; Carlos Lozano, electo de Aguascalientes; Francisco Olvera, de Hidalgo; Mario López Valdés, de Sinaloa; Egidio Torres, de Tamaulipas, y Javier Duarte, de Veracruz; Rafael Moreno Valle, gobernador de Puebla, envió a su representante, Fernando Manzanilla.
Estuvieron ausentes Fernado Borge Angulo, de Quintana Roo, y Mariano González Zarur, de Tlaxcala.
Los mandatarios ratificaron su adhesión al Acuerdo por la Legalidad de agosto de 2009, estableciendo compromisos para depurar policías, avanzar en el sistema de justicia penal, en seis meses poner en marcha unidades antisecuestro y que en ocho meses se modifique la ley para el sistema estatal de evaluación y control de confianza.
A más tardar en tres meses solicitarán la certificación, conforme a la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, para los centros estatales, contar con una plantilla suficiente en los centros estatales de control de confianza y definir acciones en los grupos de coordinación local a través del Sistema Estatal de Seguridad Pública.
En tres meses deberán acelerar en Aguascalientes, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala y Veracruz la aplicación del nuevo sistema de justicia penal.
El Acuerdo de Chihuahua también lo firmó Calderón, quien les pidió no temer pagar más a policías que a regidores o síndicos y se puso como ejemplo que se redujo el sueldo como presidente al llegar al cargo.
El mandatario federal pidió su apoyo a la reforma constitucional que crea el mando único policial, como elemento fundamental para dar seguridad a los ciudadanos y “acelerar” la reforma al nuevo sistema de justicia penal.
Respaldan al Presidente
Los gobernadores electos del país, algunos ya en funciones, dieron al Presidente su respaldo sin pretextos y asumieron su corresponsabilidad en la lucha contra el crimen organizado; apoyaron la creación de un mando único policial, aunque pidieron recursos para ello, y hasta propusieron un encuentro binacional de alto nivel con Estados Unidos.
“Apoyamos firmemente esa iniciativa que ha enviado al Congreso. Quiero decirle que Chihuahua lo respalda en su lucha contra el narcotráfico. Vamos a ganar juntos esta batalla”, resumió el anfitrión, César Duarte.
Corresponsabilidad “sin reservas y sin pretextos (...) Dejar atrás las inercias de repartir culpas y pasar a la parte de asumir responsabilidades”, dijo Jorge Herrera, de Durango. Gabino Cué, de Oaxaca, afirmó que el problema reclama la unidad de todos los mexicanos.
Calderón celebró el establecimiento del pacto con plazos perentorios, mismos que serán vigilados en su cumplimiento por testigos sociales.
El convenio se estableció con 12 gobiernos estatales, aunque a la firma sólo asistieron los de Chihuahua, César Duarte; Durango, Jorge Herrera; Zacatecas, Miguel Alonso Reyes; Oaxaca, Gabino Cué; Carlos Lozano, electo de Aguascalientes; Francisco Olvera, de Hidalgo; Mario López Valdés, de Sinaloa; Egidio Torres, de Tamaulipas, y Javier Duarte, de Veracruz; Rafael Moreno Valle, gobernador de Puebla, envió a su representante, Fernando Manzanilla.
Estuvieron ausentes Fernado Borge Angulo, de Quintana Roo, y Mariano González Zarur, de Tlaxcala.
Los mandatarios ratificaron su adhesión al Acuerdo por la Legalidad de agosto de 2009, estableciendo compromisos para depurar policías, avanzar en el sistema de justicia penal, en seis meses poner en marcha unidades antisecuestro y que en ocho meses se modifique la ley para el sistema estatal de evaluación y control de confianza.
A más tardar en tres meses solicitarán la certificación, conforme a la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, para los centros estatales, contar con una plantilla suficiente en los centros estatales de control de confianza y definir acciones en los grupos de coordinación local a través del Sistema Estatal de Seguridad Pública.
En tres meses deberán acelerar en Aguascalientes, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala y Veracruz la aplicación del nuevo sistema de justicia penal.
El Acuerdo de Chihuahua también lo firmó Calderón, quien les pidió no temer pagar más a policías que a regidores o síndicos y se puso como ejemplo que se redujo el sueldo como presidente al llegar al cargo.
El mandatario federal pidió su apoyo a la reforma constitucional que crea el mando único policial, como elemento fundamental para dar seguridad a los ciudadanos y “acelerar” la reforma al nuevo sistema de justicia penal.
Respaldan al Presidente
Los gobernadores electos del país, algunos ya en funciones, dieron al Presidente su respaldo sin pretextos y asumieron su corresponsabilidad en la lucha contra el crimen organizado; apoyaron la creación de un mando único policial, aunque pidieron recursos para ello, y hasta propusieron un encuentro binacional de alto nivel con Estados Unidos.
“Apoyamos firmemente esa iniciativa que ha enviado al Congreso. Quiero decirle que Chihuahua lo respalda en su lucha contra el narcotráfico. Vamos a ganar juntos esta batalla”, resumió el anfitrión, César Duarte.
Corresponsabilidad “sin reservas y sin pretextos (...) Dejar atrás las inercias de repartir culpas y pasar a la parte de asumir responsabilidades”, dijo Jorge Herrera, de Durango. Gabino Cué, de Oaxaca, afirmó que el problema reclama la unidad de todos los mexicanos.
Jorge Ramos, El Universal, 13 de octubre.
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