Vecinos y miembros organizaciones sociales contra la Supervía se tomaron la foto de bienvenida para los tres mil gobernadores que la semana próxima vendrán a a la Cumbre Mundial de Líderes Locales y Regionales y la Cumbre Climática Mundial de Alcaldes (CCLIMA).
En inglés y español, el mensaje fue claro: “Bienvenidos alcaldes, estamos trabajando para el cambio climático”. Además, en las mantas aparece una caricatura donde la Supervía atraviesa dos montañas con autos cuyos escapes generan una nube negra, mientras máquinas resguardadas por granaderos y sus escudos derriban árboles.
La foto fue en la plaza de Santo Domingo, frente a la Antigua Escuela de Medicina, que será la sede de la cumbre. Los organizadores dijeron que estarán ahí de manera pacífica, así como en los diversos lugares donde se harán los foros durante toda la semana para mostrar su desacuerdo por la construcción de esa vialidad que realiza el gobierno de Marcelo Ebrard.
Gerardo Moncada, representante de la organización El poder del consumidor, explicó que “estamos pidiendo a alcaldes que incluyan estos temas, si va a haber alcaldes que desarrollen proyectos de vialidades para automóviles y segundos pisos, que este tipo de cosas sean analizadas seriamente de acuerdo a la experiencia internacional”.
En entrevista, el activista destacó los casos de ciudades estadounidenses como Portland, San Francisco y Nueva York, “donde se han desmontado los segundos pisos para darle un orden más eficiente al transporte público, se han dado cuenta que no funcionan”.
En Nueva York, dijo, ya desmontaron el West Side Highway, el primer segundo piso que se instaló en el mundo, porque vieron que la única alternativa después de unos años es cómo se amplía porque se vuelve a saturar y genera el doble de tráfico y contaminación.
En el caso de la Supervía, dijo que es peor “porque está diseñada en una zona de recarga de mantos acuíferos”. Criticó que se ha querido centrar la atención en los habitantes de Magdalena Contreras, pero advirtió que las consecuencias las resentirán habitantes con problemas de agua al oriente del DF.
Cuestionó el Plan Verde en el que, según una encuesta, 850 mil dijeron que querían más transporte público, “entonces de qué nos sirve que tres mil 500 personas vengan a decir que si quieren la Supervía si hay 850 mil que dijeron que quieren transporte público, ¿por qué eso lo ignora ahora Ebrard?”.
“El jefe de gobierno es el presidente del Consejo Mundial de Alcaldes comprometidos con el cambio climático, pedimos que no sean sólo membretes, si no que haya un compromiso efectivo y que se pueda constatar que se cumple al pie de la letra”.
En inglés y español, el mensaje fue claro: “Bienvenidos alcaldes, estamos trabajando para el cambio climático”. Además, en las mantas aparece una caricatura donde la Supervía atraviesa dos montañas con autos cuyos escapes generan una nube negra, mientras máquinas resguardadas por granaderos y sus escudos derriban árboles.
La foto fue en la plaza de Santo Domingo, frente a la Antigua Escuela de Medicina, que será la sede de la cumbre. Los organizadores dijeron que estarán ahí de manera pacífica, así como en los diversos lugares donde se harán los foros durante toda la semana para mostrar su desacuerdo por la construcción de esa vialidad que realiza el gobierno de Marcelo Ebrard.
Gerardo Moncada, representante de la organización El poder del consumidor, explicó que “estamos pidiendo a alcaldes que incluyan estos temas, si va a haber alcaldes que desarrollen proyectos de vialidades para automóviles y segundos pisos, que este tipo de cosas sean analizadas seriamente de acuerdo a la experiencia internacional”.
En entrevista, el activista destacó los casos de ciudades estadounidenses como Portland, San Francisco y Nueva York, “donde se han desmontado los segundos pisos para darle un orden más eficiente al transporte público, se han dado cuenta que no funcionan”.
En Nueva York, dijo, ya desmontaron el West Side Highway, el primer segundo piso que se instaló en el mundo, porque vieron que la única alternativa después de unos años es cómo se amplía porque se vuelve a saturar y genera el doble de tráfico y contaminación.
En el caso de la Supervía, dijo que es peor “porque está diseñada en una zona de recarga de mantos acuíferos”. Criticó que se ha querido centrar la atención en los habitantes de Magdalena Contreras, pero advirtió que las consecuencias las resentirán habitantes con problemas de agua al oriente del DF.
Cuestionó el Plan Verde en el que, según una encuesta, 850 mil dijeron que querían más transporte público, “entonces de qué nos sirve que tres mil 500 personas vengan a decir que si quieren la Supervía si hay 850 mil que dijeron que quieren transporte público, ¿por qué eso lo ignora ahora Ebrard?”.
“El jefe de gobierno es el presidente del Consejo Mundial de Alcaldes comprometidos con el cambio climático, pedimos que no sean sólo membretes, si no que haya un compromiso efectivo y que se pueda constatar que se cumple al pie de la letra”.
Sara Pantoja, El Universal, 14 de noviembre.
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