Escapa a ejecución cautivo de FARC

BOGOTÁ.- En medio del luto que embarga a Colombia, por la ejecución de tres policías y un militar secuestrados por la guerrilla de las FARC, la vuelta a la libertad del sargento de la Policía Luis Alberto Erazo fue un pequeño consuelo.

El sábado, al escuchar un enfrentamiento entre el Ejército y los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que los custodiaban, Erazo decidió huir.

Fue perseguido por tres guerrilleros, quienes lanzaron granadas para evitar su fuga, lo que le causó heridas en el rostro.

Erazo logró esconderse y por la tarde fue rescatado, atendido y estabilizado.

De ahí que al llegar ayer a Bogotá, en un avión de la Policía, llevara un vendaje en la mejilla izquierda. Con aparente buena salud fue trasladado al hospital y a reunirse con los suyos.

En contraste, Johan Steven, de 13 años, reclamó ayer a la guerrilla haberle devuelto a su padre, el sargento del Ejército Libio José Martínez, en un cajón.


Octavio Pineda corresponsal, Reforma 28 de noviembre.