Juristas coincidieron ayer en la importancia de la movilización social para frenar la propuesta del Ejecutivo federal en materia energética. Y el solo hecho de haberla enviado al Congreso, en opinión del constitucionalista Raúl Carrancá y del ex consejero electoral Jaime Cárdenas, convierte a Felipe Calderón en sujeto de juicio político.
En el simposio Petróleo y Seguridad Energética, organizado por el Frente Amplio Progresista, también el ex magistrado Juventino Castro, el ex procurador capitalino Bernardo Bátiz, el priista Manuel Bartlett y el historiador Lorenzo Meyer concordaron en que la iniciativa calderonista contraviene claramente el artículo 27 constitucional.
Bernardo Bátiz, también secretario de Justicia y Seguridad del denominado gobierno legítimo que preside Andrés Manuel López Obrador, destacó que “si el pueblo evita con su participación y sus movilizaciones el atropello a la Constitución que se pretende”, con el mismo impulso se rescatará la confianza en nosotros, nuestros recursos, ingenio y fortaleza, y en nuestro destino como nación independiente.
Jaime Cárdenas planteó que con las iniciativas de Calderón en materia petrolera se fragua “un golpe constitucional”, por lo que consideró que en los meses por venir será importante la movilización social y revestirla con acciones jurídicas para obligar a Calderón a que cumpla con la Constitución, al igual que a los legisladores.
Raúl Carrancá sostuvo que el simple hecho de que el presidente Felipe Calderón haya enviado al Congreso una iniciativa de ley o de decreto, en su concepto constitucional y jurídico, “ya es un acto de autoridad”.
En el simposio Petróleo y Seguridad Energética, organizado por el Frente Amplio Progresista, también el ex magistrado Juventino Castro, el ex procurador capitalino Bernardo Bátiz, el priista Manuel Bartlett y el historiador Lorenzo Meyer concordaron en que la iniciativa calderonista contraviene claramente el artículo 27 constitucional.
Bernardo Bátiz, también secretario de Justicia y Seguridad del denominado gobierno legítimo que preside Andrés Manuel López Obrador, destacó que “si el pueblo evita con su participación y sus movilizaciones el atropello a la Constitución que se pretende”, con el mismo impulso se rescatará la confianza en nosotros, nuestros recursos, ingenio y fortaleza, y en nuestro destino como nación independiente.
Jaime Cárdenas planteó que con las iniciativas de Calderón en materia petrolera se fragua “un golpe constitucional”, por lo que consideró que en los meses por venir será importante la movilización social y revestirla con acciones jurídicas para obligar a Calderón a que cumpla con la Constitución, al igual que a los legisladores.
Raúl Carrancá sostuvo que el simple hecho de que el presidente Felipe Calderón haya enviado al Congreso una iniciativa de ley o de decreto, en su concepto constitucional y jurídico, “ya es un acto de autoridad”.
Nota de Mauricio Juárez, Milenio, 7 de mayo.
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