La reforma a Pemex no pasa sin referendo

En clara respuesta a lo dicho por Cuauhtémoc Cárdenas, respecto a que fue un error tomar las tribunas del Congreso, Andrés Manuel López Obrador sostuvo que de no haber realizado esa acción les hubieran dado madruguete y se habría aprobado fast-track la reforma energética.

El tabasqueño adelantó parte de su estrategia para los próximos meses: “Vamos a pedir que antes de que se lleve a cabo una reforma entreguista (una vez concluido el debate sobre el petróleo) se consulte al pueblo, ya sea a través de un referendo, un plebiscito o una consulta popular”.

En entrevista telefónica, difundida por radio en parte de Estados Unidos, comentó: “Respeto mucho al ingeniero Cárdenas, pero hay que ver las causas y no sólo los efectos. Si nuestros legisladores no hubieran hecho eso (tomar las tribunas), los de PRI y PAN hubieran aprobado al vapor la reforma, a espaldas del pueblo, sin que la gente se diese cuenta de lo que se iba a hacer, del agravio tan grande que se estaba cocinando.”

En entrevista con la estación W Radio de California, López Obrador precisó que al rechazar la reforma energética de Felipe Calderón no se opone al progreso de México; “eso es puro cuento y pura mentira. Estoy en contra de que unos cuantos quieran hacer negocio y quedarse con el petróleo, que es de todos los mexicanos”.

A pregunta expresa reiteró que “políticos mexicanos han sido sobornados por empresas trasnacionales para privatizar Pemex”, e insistió en que tanto Calderón como su secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, tienen sus empresas favoritas, como la empresa española Repsol. Fue esa compañía, recordó, la primera en recibir un contrato de servicios múltiples, que están prohibidos por la Constitución.

“También se vendieron bonos que tenía Pemex en Repsol y se generó un quebranto porque subieron las acciones; además, le acaban de comprar gas a esa trasnacional, mediante un contrato de 21 mil millones de dólares.”

Aseguró que por denunciar esas irregularidades e informar a la población de las verdaderas intenciones privatizadoras del gobierno panista están molestos con él, y por lo mismo han reforzado la campaña en su contra. “Pero, a pesar de los ataques, lo vamos a seguir haciendo”, advirtió.

En la entrevista telefónica con Mirthala Salinas y Gerardo Lorenz, López Obrador hizo énfasis en que no existe necesidad de privatizar Pemex para fortalecerla, toda vez que existen recursos suficientes para que el petróleo siga estando en manos de la nación.

Nunca, dijo, se había obtenido tanto dinero como ahora, con los precios tan altos. Fox fue el que más recibió: 330 mil millones de dólares, “y todos esos recursos se fueron por el caño de la corrupción y se utilizaron para hacer más onerosa a la burocracia”.

Lo mismo ocurre con Calderón: más de 20 mil millones de dólares al año, “y si ese dinero se destinara a Pemex no habría necesidad de privatizar”.

Lo cierto, agregó, es que detrás de la reforma, “que viola 12 artículos de la Constitución”, no hay más que la intención de un grupo de hacer negocios, porque entrega a particulares exploración, extracción, refinación, petroquímica, ductos, transporte y almacenamiento.

“Eso es, en esencia, el fondo del asunto, y es lo que no vamos a permitir; tenemos claro que los panistas salieron igual o peor que los priistas”.

Nota de Heliodoro Cárdenas, Milenio, 1º de mayo.