La séptima entrega del Premio Nacional de Periodismo estuvo marcada por el asesinato de las periodistas triquis Felícitas Martínez y Teresa Bautista, quienes todavía están cumpliendo el cometido de denunciar la impunidad contra los trabajadores de los medios de comunicación.
Los medios de comunicación comunitarios son una herramienta de defensa, de denuncia del “mal gobierno”, necesarios para las comunidades indígenas, de por sí abandonadas por las autoridades municipales y federales, que no podrán ser acalladas aun cuando se recurra a acciones extremas de represión.
Aunque existan voces que no consideran a las locutoras de Radio Copala como periodistas, el Consejo Ciudadano las designó este año como ganadoras post mortem del Premio Nacional de Periodismo en la categoría de Orientación a la Sociedad.
Gregoria García de Jesús y Gregoria Martínez López recibieron la presea en nombre de Teresa y Felícitas, respectivamente. Yanira, la prima de esta última, exigió justicia al gobierno de Oaxaca por las muertes de las locutoras, “que no se negocie con los asesinos”, demandó.
La voz de Tere y Feli “es la voz de miles voces en México” que exigen justicia. Y aunque “digan que no eran periodistas, tan lo eran que son reconocidas como las mejores en orientación a la sociedad”. Enseguida, los presentes ovacionaron de pie la reflexión.
Adela Navarro, presidenta del jurado, aseguró que los periodistas trabajan entre los flancos de la delincuencia organizada y la impunidad por la “intolerancia al pensamiento crítico”.
Exigió al presidente Felipe Calderón la solución a crímenes cometidos contra periodistas y reiteró la necesidad de lograr en el gremio “solidaridad” para enfrentar a los “represores de la libertad”.
José Morales Orozco, presidente del Consejo Ciudadano del Premio Nacional de Periodismo y rector de la Universidad Iberoamericana, dijo que en los últimos ocho años, 24 periodistas fueron asesinados, ocho se encuentran desaparecidos y muchos más han sido amenazados, por lo que urgió a darle paso a la “libre expresión, a la concordia y convivencia ciudadana que nos reclama el país”.
- Claves
Convocatoria
• Después de la convocatoria se recibieron mil 5 trabajos, 45 por ciento fueron del Distrito Federal y 76 por ciento de prensa escrita.
• El premio consiste en una estatuilla con la figura de una paloma, creación de Juan Soriano, y 50 mil pesos.
• Los jurados fueron Adela Navarro Bello, Carlos Loret de Mola, Clara Jusidman, Elvira Hernández Carballido, Enrique Tamés Muñoz, Federico Fasano Mertens, Gerardo Galarza Torres, Javier Garza Ramos, Jorge Luis Volpi Escalante, José Carreño Carlón, José Luis Perujo Roncal, Ricardo Alemán Alemán y Roberta Garza Medina.
Los medios de comunicación comunitarios son una herramienta de defensa, de denuncia del “mal gobierno”, necesarios para las comunidades indígenas, de por sí abandonadas por las autoridades municipales y federales, que no podrán ser acalladas aun cuando se recurra a acciones extremas de represión.
Aunque existan voces que no consideran a las locutoras de Radio Copala como periodistas, el Consejo Ciudadano las designó este año como ganadoras post mortem del Premio Nacional de Periodismo en la categoría de Orientación a la Sociedad.
Gregoria García de Jesús y Gregoria Martínez López recibieron la presea en nombre de Teresa y Felícitas, respectivamente. Yanira, la prima de esta última, exigió justicia al gobierno de Oaxaca por las muertes de las locutoras, “que no se negocie con los asesinos”, demandó.
La voz de Tere y Feli “es la voz de miles voces en México” que exigen justicia. Y aunque “digan que no eran periodistas, tan lo eran que son reconocidas como las mejores en orientación a la sociedad”. Enseguida, los presentes ovacionaron de pie la reflexión.
Adela Navarro, presidenta del jurado, aseguró que los periodistas trabajan entre los flancos de la delincuencia organizada y la impunidad por la “intolerancia al pensamiento crítico”.
Exigió al presidente Felipe Calderón la solución a crímenes cometidos contra periodistas y reiteró la necesidad de lograr en el gremio “solidaridad” para enfrentar a los “represores de la libertad”.
José Morales Orozco, presidente del Consejo Ciudadano del Premio Nacional de Periodismo y rector de la Universidad Iberoamericana, dijo que en los últimos ocho años, 24 periodistas fueron asesinados, ocho se encuentran desaparecidos y muchos más han sido amenazados, por lo que urgió a darle paso a la “libre expresión, a la concordia y convivencia ciudadana que nos reclama el país”.
- Claves
Convocatoria
• Después de la convocatoria se recibieron mil 5 trabajos, 45 por ciento fueron del Distrito Federal y 76 por ciento de prensa escrita.
• El premio consiste en una estatuilla con la figura de una paloma, creación de Juan Soriano, y 50 mil pesos.
• Los jurados fueron Adela Navarro Bello, Carlos Loret de Mola, Clara Jusidman, Elvira Hernández Carballido, Enrique Tamés Muñoz, Federico Fasano Mertens, Gerardo Galarza Torres, Javier Garza Ramos, Jorge Luis Volpi Escalante, José Carreño Carlón, José Luis Perujo Roncal, Ricardo Alemán Alemán y Roberta Garza Medina.
Nota de Nayeli Roldán, Milenio, 16 de mayo.
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