LA HABANA.- Los crecientes intereses de Estados Unidos en Cuba, así como la intención de diálogo entre Washington y La Habana permiten vislumbrar una distensión en la relación bilateral, aseguró Rafael Hernández, director de la revista Temas, considerado el espacio de debate más plural de la prensa isleña.
"En este momento Cuba tiene una posición de diálogo. El Gobierno ha dicho que está dispuesto a conversar con Washington en plano de igualdad, sin doble rasero ni precondiciones. No hay nada ideológico en eso. Se trata de entender que podemos ser adversarios sin ser enemigos; cosa difícil en dos países con tanta diferencia de escala y tan cercanos geográficamente", dijo Hernández en entrevista con REFORMA.
El experto en relaciones Cuba-EU afirmó que en los ámbitos de los negocios y la industria, en las instituciones, las Iglesias, el mundo de las artes, el entretenimiento y el deporte, además del turismo, hay actores visibles muy interesados que ya están en contacto con la Isla.
"Son muchos los que vienen a desplegar sus intereses aquí, no por simpatía hacia el Gobierno cubano sino buscando beneficios; razón por la cual pienso que quizá el Congreso estadounidense levante pronto las restricciones de viaje a sus ciudadanos", agregó.
Según reportes de prensa, el Gobierno de Barack Obama flexibilizará pronto la prohibición para que los estadounidenses viajen a Cuba.
Hernández aseguró también que ambos países están en el momento adecuado para sentar las bases de una nueva relación.
"Nunca antes hemos estado en un contexto tan favorable de ambas partes, y también hemisférico y global. Este es un momento de distensión incluso con Rusia y China. Cuba tiene diversidad de relaciones con cantidad de países lo que convierte el conflicto con Estados Unidos Unidos en algo extemporáneo además de ineficaz", indicó.
Sin embargo, aclaró que uno de los puntos que deben tomarse en cuenta dentro de la negociación de una nueva relación binacional es el de el respeto a los derechos civiles y las libertades democráticas.
"Uno de los requisitos del diálogo es que no haya doble rasero, los señalamientos por restricciones a los derechos humanos se deben hacer a Cuba en la misma medida que a otros países de América Latina, Norteamérica o Europa", subrayó.
El experto minimizó el papel de Fidel Castro, aparentemente recuperado de un mal intestinal que lo obligó a dejar el poder, en este proceso de acercamiento con Estados Unidos.
"No interpreto que esté regresando a asumir los cambios de la política cubana", puntualizó.
"En este momento Cuba tiene una posición de diálogo. El Gobierno ha dicho que está dispuesto a conversar con Washington en plano de igualdad, sin doble rasero ni precondiciones. No hay nada ideológico en eso. Se trata de entender que podemos ser adversarios sin ser enemigos; cosa difícil en dos países con tanta diferencia de escala y tan cercanos geográficamente", dijo Hernández en entrevista con REFORMA.
El experto en relaciones Cuba-EU afirmó que en los ámbitos de los negocios y la industria, en las instituciones, las Iglesias, el mundo de las artes, el entretenimiento y el deporte, además del turismo, hay actores visibles muy interesados que ya están en contacto con la Isla.
"Son muchos los que vienen a desplegar sus intereses aquí, no por simpatía hacia el Gobierno cubano sino buscando beneficios; razón por la cual pienso que quizá el Congreso estadounidense levante pronto las restricciones de viaje a sus ciudadanos", agregó.
Según reportes de prensa, el Gobierno de Barack Obama flexibilizará pronto la prohibición para que los estadounidenses viajen a Cuba.
Hernández aseguró también que ambos países están en el momento adecuado para sentar las bases de una nueva relación.
"Nunca antes hemos estado en un contexto tan favorable de ambas partes, y también hemisférico y global. Este es un momento de distensión incluso con Rusia y China. Cuba tiene diversidad de relaciones con cantidad de países lo que convierte el conflicto con Estados Unidos Unidos en algo extemporáneo además de ineficaz", indicó.
Sin embargo, aclaró que uno de los puntos que deben tomarse en cuenta dentro de la negociación de una nueva relación binacional es el de el respeto a los derechos civiles y las libertades democráticas.
"Uno de los requisitos del diálogo es que no haya doble rasero, los señalamientos por restricciones a los derechos humanos se deben hacer a Cuba en la misma medida que a otros países de América Latina, Norteamérica o Europa", subrayó.
El experto minimizó el papel de Fidel Castro, aparentemente recuperado de un mal intestinal que lo obligó a dejar el poder, en este proceso de acercamiento con Estados Unidos.
"No interpreto que esté regresando a asumir los cambios de la política cubana", puntualizó.
Yolanda Martínez corresponsal, Reforma, 19 de agosto.
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