CARACAS.- La violencia ha sido un tema tabú para el Gobierno del Presidente Hugo Chávez, y ya comenzó a serlo también para los periódicos venezolanos.
En su edición de ayer, El Nacional publicó carteles blancos con la palabra "censurado" en los espacios previstos para la información de actos criminales como medida de protesta.
Su director, Miguel Henrique Otero, denunció que la sentencia que prohibió a todos los medios impresos divulgar imágenes violentas, en reacción a la publicación, el viernes, en este diario de una toma de la morgue de Caracas colmada de cadáveres, "(es) una violación a la Constitución y a la libertad de expresión".
En el caso de El Nacional, la medida amplió el veto a cualquier información y publicidad "con contenido de sangre, armas, mensajes de terror, agresiones físicas, imágenes que aticen contenidos de guerra y mensajes sobre muertos y decesos".
La decisión causó indignación entre los medios de comunicación del país.
El periódico Tal Cual, que el lunes difundió la polémica foto, volvió a publicarla ayer en un abierto desafío a la censura.
"Un Presidente que jamás aborda el tema de la violencia en sus kilométricas chácharas, ahora nos sale con la especie de que la denuncia de tan grave calamidad pública es nada menos que un arma de 'contrarrevolución'", señaló Teodoro Petkoff, su director, en una editorial.
"Ya, pues, estamos avisados por dónde vienen los tiros. La libertad de expresión es el objetivo", añadió.
El Bloque Venezolano de Prensa, que agrupa los principales diarios del país, culpó a Chávez de promover la medida para ocultar la criminalidad como táctica ante las elecciones legislativas del 26 de septiembre.
"La decisión del tribunal responde absolutamente a la voluntad del Jefe de Estado", denunció el presidente de la organización, David Natera.
Por su parte, el Colegio Nacional de Periodistas (CNP) se declaró en emergencia.
"Éste es un paso más del Ejecutivo hacia la criminalización de la información", señaló su líder, Silvia Alegrett.
Carlos Correa, director de la ONG Espacio Público, recordó que desde 1992, cuando el Gobierno mandó censores a los diarios después del intento de asonada liderado por Chávez, no se veía nada similar.
"Se trata de un mecanismo de censura previa, lo cual es inconstitucional y va en contra de la libertad de expresión y los derechos humanos", denunció.
La Carta Magna venezolana establece que la información no puede ser restringida ni siquiera en estado de excepción.
Chávez, quien señala que la inseguridad es un problema mundial, dijo ayer que hay un complot para frenar su revolución.
"Esto es parte de una campaña internacional que ha tomado espacios importantes en las pantallas, en cadenas internacionales, en los periódicos de Europa, de Estados Unidos y América Latina", externó.
Por la tarde, la Policía fue a El Nacional en busca de la polémica fotografía de la morgue.
"Esto es una tramoya política para ver cómo se oculta el tema de la inseguridad en Venezuela en un momento en que los venezolanos están asqueados de la inseguridad", sostuvo Otero.
Asunto de peso
La criminalidad es una de las principales preocupaciones en Venezuela.
- Siete de cada diez habitantes consideran que la violencia es el problema más grave de esta nación sudamericana, coinciden las encuestas.
- En 1998, se registraron 4 mil 550 homicidios. En 2009, hubo 16 mil 47 asesinatos y sólo mil 497 detenciones, según cifras extraoficiales del Observatorio de Violencia (OV).
- Entre 1999 y 2009, más de 123 mil personas murieron de manera violenta en la nación, de acuerdo con esta organización.
- En lo que va de 2010, 54 niños han sido asesinados.
- Tomando en cuenta estas cifras, Venezuela es el país más violento de Sudamérica.
- Desde 2005, no se divulgan datos oficiales sobre el tema.
En su edición de ayer, El Nacional publicó carteles blancos con la palabra "censurado" en los espacios previstos para la información de actos criminales como medida de protesta.
Su director, Miguel Henrique Otero, denunció que la sentencia que prohibió a todos los medios impresos divulgar imágenes violentas, en reacción a la publicación, el viernes, en este diario de una toma de la morgue de Caracas colmada de cadáveres, "(es) una violación a la Constitución y a la libertad de expresión".
En el caso de El Nacional, la medida amplió el veto a cualquier información y publicidad "con contenido de sangre, armas, mensajes de terror, agresiones físicas, imágenes que aticen contenidos de guerra y mensajes sobre muertos y decesos".
La decisión causó indignación entre los medios de comunicación del país.
El periódico Tal Cual, que el lunes difundió la polémica foto, volvió a publicarla ayer en un abierto desafío a la censura.
"Un Presidente que jamás aborda el tema de la violencia en sus kilométricas chácharas, ahora nos sale con la especie de que la denuncia de tan grave calamidad pública es nada menos que un arma de 'contrarrevolución'", señaló Teodoro Petkoff, su director, en una editorial.
"Ya, pues, estamos avisados por dónde vienen los tiros. La libertad de expresión es el objetivo", añadió.
El Bloque Venezolano de Prensa, que agrupa los principales diarios del país, culpó a Chávez de promover la medida para ocultar la criminalidad como táctica ante las elecciones legislativas del 26 de septiembre.
"La decisión del tribunal responde absolutamente a la voluntad del Jefe de Estado", denunció el presidente de la organización, David Natera.
Por su parte, el Colegio Nacional de Periodistas (CNP) se declaró en emergencia.
"Éste es un paso más del Ejecutivo hacia la criminalización de la información", señaló su líder, Silvia Alegrett.
Carlos Correa, director de la ONG Espacio Público, recordó que desde 1992, cuando el Gobierno mandó censores a los diarios después del intento de asonada liderado por Chávez, no se veía nada similar.
"Se trata de un mecanismo de censura previa, lo cual es inconstitucional y va en contra de la libertad de expresión y los derechos humanos", denunció.
La Carta Magna venezolana establece que la información no puede ser restringida ni siquiera en estado de excepción.
Chávez, quien señala que la inseguridad es un problema mundial, dijo ayer que hay un complot para frenar su revolución.
"Esto es parte de una campaña internacional que ha tomado espacios importantes en las pantallas, en cadenas internacionales, en los periódicos de Europa, de Estados Unidos y América Latina", externó.
Por la tarde, la Policía fue a El Nacional en busca de la polémica fotografía de la morgue.
"Esto es una tramoya política para ver cómo se oculta el tema de la inseguridad en Venezuela en un momento en que los venezolanos están asqueados de la inseguridad", sostuvo Otero.
Asunto de peso
La criminalidad es una de las principales preocupaciones en Venezuela.
- Siete de cada diez habitantes consideran que la violencia es el problema más grave de esta nación sudamericana, coinciden las encuestas.
- En 1998, se registraron 4 mil 550 homicidios. En 2009, hubo 16 mil 47 asesinatos y sólo mil 497 detenciones, según cifras extraoficiales del Observatorio de Violencia (OV).
- Entre 1999 y 2009, más de 123 mil personas murieron de manera violenta en la nación, de acuerdo con esta organización.
- En lo que va de 2010, 54 niños han sido asesinados.
- Tomando en cuenta estas cifras, Venezuela es el país más violento de Sudamérica.
- Desde 2005, no se divulgan datos oficiales sobre el tema.
Cristina Marcano, Reforma, 19 de agosto.
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