AUSTIN, Texas (Agencias).— El gobernador de Texas, Rick Perry, pidió ayer al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, el urgente despliegue de mil soldados de la Guardia Nacional en la frontera, a fin de confrontar la creciente amenaza de los cárteles de la droga.
En una carta entregada a la Casa Blanca, Rick Perry advirtió que frente a la ausencia de una fuerte presencia federal “es sólo cuestión de tiempo antes que esa violencia afecte a más inocentes estadounidenses”. El propósito de la misiva, apuntó el mandatario local republicano, fue para poner de relieve “la extrema amenaza que se desarrolla en nuestra frontera sur en la forma de cárteles internacionales de la droga y de pandillas transnacionales”.
En su carta, Perry dijo que había “una creciente evidencia de la violencia que se está pasando” desde México y pidió a Obama enviar más recursos a la región para “incrementar y hacer finalmente lo que sea necesario para asegurar nuestras fronteras”.
Insistió en la necesidad de mayor seguridad en la frontera sur de Texas, que “no puede continuar sobrestimada por el gobierno federal”, calificando la situación actual como una amenaza de seguridad nacional.
Aunque Obama anunció el envío de mil 200 soldados de la Guardia Nacional a la frontera de Estados Unidos con México, que comenzarán su llegada efectiva en septiembre, Perry dijo que los 286 asignados a cubrir la frontera texana son “insuficientes”.
En adición al despliegue de más soldados, Perry solicitó el rápido envío de vehículos aéreos no tripulados.
La carta cita ejemplos de violencia del lado de Texas en la frontera, incluyendo una granada que rodó dentro de un bar en Pharr, sin hacer explosión, en el 2009. Las granadas han sido relacionadas con ataques similares en Monterrey, México. También mencionó el asesinato de un integrante del cártel de Juárez que vivía en El Paso y tiroteos desde Ciudad Juárez, México, que han hecho que las balas lleguen hasta las paredes en El Paso.
“´Debemos demostrarle a los cárteles que Washington no tolerará más sus actos de terrorismo y crímenes en la región fronteriza”´, agregó el gobernador.
Por otro lado, una investigación difundida ayer por The Arizona Republic dio cuenta de que a raíz de la ley antiinmigrante SB1070, el mercado de jornaleros en Arizona se redujo en casi 90%. En sitios donde comúnmente había unos 200 jornaleros cerca de ferreterías en Phoenix, ahora cuando mucho se reúnen unos 20, señaló el diario. Si antes hallaban trabajo hasta dos veces en un mismo día, ahora con suerte consiguen dos empleos eventuales a la semana
En una carta entregada a la Casa Blanca, Rick Perry advirtió que frente a la ausencia de una fuerte presencia federal “es sólo cuestión de tiempo antes que esa violencia afecte a más inocentes estadounidenses”. El propósito de la misiva, apuntó el mandatario local republicano, fue para poner de relieve “la extrema amenaza que se desarrolla en nuestra frontera sur en la forma de cárteles internacionales de la droga y de pandillas transnacionales”.
En su carta, Perry dijo que había “una creciente evidencia de la violencia que se está pasando” desde México y pidió a Obama enviar más recursos a la región para “incrementar y hacer finalmente lo que sea necesario para asegurar nuestras fronteras”.
Insistió en la necesidad de mayor seguridad en la frontera sur de Texas, que “no puede continuar sobrestimada por el gobierno federal”, calificando la situación actual como una amenaza de seguridad nacional.
Aunque Obama anunció el envío de mil 200 soldados de la Guardia Nacional a la frontera de Estados Unidos con México, que comenzarán su llegada efectiva en septiembre, Perry dijo que los 286 asignados a cubrir la frontera texana son “insuficientes”.
En adición al despliegue de más soldados, Perry solicitó el rápido envío de vehículos aéreos no tripulados.
La carta cita ejemplos de violencia del lado de Texas en la frontera, incluyendo una granada que rodó dentro de un bar en Pharr, sin hacer explosión, en el 2009. Las granadas han sido relacionadas con ataques similares en Monterrey, México. También mencionó el asesinato de un integrante del cártel de Juárez que vivía en El Paso y tiroteos desde Ciudad Juárez, México, que han hecho que las balas lleguen hasta las paredes en El Paso.
“´Debemos demostrarle a los cárteles que Washington no tolerará más sus actos de terrorismo y crímenes en la región fronteriza”´, agregó el gobernador.
Por otro lado, una investigación difundida ayer por The Arizona Republic dio cuenta de que a raíz de la ley antiinmigrante SB1070, el mercado de jornaleros en Arizona se redujo en casi 90%. En sitios donde comúnmente había unos 200 jornaleros cerca de ferreterías en Phoenix, ahora cuando mucho se reúnen unos 20, señaló el diario. Si antes hallaban trabajo hasta dos veces en un mismo día, ahora con suerte consiguen dos empleos eventuales a la semana
El Universal, 10 de agosto.
0 Responses to "Texas pide auxilio para la frontera"
Publicar un comentario