Cuba autoriza créditos para negocios privados

LA HABANA (Agencias).— Cuba dio a conocer ayer una nueva política de concesión de créditos para la iniciativa privada, que permitirá a pequeños agricultores y otros trabajadores por cuenta propia tener acceso a préstamos y otros servicios bancarios.
Según el decreto publicado en la Gaceta Oficial de Cuba, los agricultores y los llamados “cuentapropistas” tendrán acceso a los créditos bancarios a partir del 20 de diciembre, fecha en la que entra en vigor la nueva normativa. El decreto del régimen presidido por Raúl Castro prevé la concesión de créditos a los agricultores que “acrediten legalmente la tenencia de la tierra”, ya sea como propietarios o arrendadores, detalló el portal Cubadebate.
La norma regulará la concesión de créditos y otros servicios bancarios a particulares en el sector agropecuario, así como a otras personas que trabajen por cuenta propia. También se beneficiará el sector de la construcción de vivienda, entre otros modelos de “gestión no estatal”, según el decreto.
Los agricultores podrán obtener créditos para “la compra y reparación de equipos y medios de trabajo, u otras acciones que contribuyan a elevar las producciones”, señaló el diario oficial Granma. Los “cuentapropistas” también podrán solicitar créditos “para financiar la compra de bienes e insumos para un menor desempeño de su actividad”. En la construcción, los particulares podrán utilizar los préstamos para comprar materiales y para pagar las obras de sus viviendas.
La nueva política crediticia es parte de las reformas que impulsa el régimen de Raúl Castro en su afán de “actualizar” su modelo socialista.
Los “lineamientos” de la nueva política económica y social aprobados en el VI Congreso del Partido Comunista, en abril pasado, abren la puerta a la iniciativa privada en la isla, después de décadas de monopolio estatal.
La falta de préstamos era uno de los elementos más criticados por economistas y algunos emprendedores que abrieron negocios luego de la actualización del modelo iniciada por Castro para racionalizar el Estado, eliminar subsidios y elevar la productividad.
“La nueva política crediticia es otro paso hacia la configuración de una economía mixta, con integración entre los diferentes segmentos estatal y no estatal en un mercado nacional común”, aseguró a la AP el economista cubano que labora en la Universidad de Denver, Arturo López-Levy.
Según el experto, “la apertura crediticia adoptada hoy significa una ampliación del espectro de actores económicos y otro paso para dinamizar la contratación de servicios y producciones entre los diferentes sectores estatal y no estatal”, agregó.
Las normas establecen que los importes y plazos de amortización del crédito se acordarán entre la institución financiera y el solicitante, mientras que el Banco Central será el regulador de las tasas aplicables.
La principal fuente de amortización serán “los ingresos personales lícitos que obtengan los sujetos de créditos”, agregó el texto de la ley. Sin embargo, la normativa permitirá constituir hipotecas, toda una novedad en el marco del modelo cubano que desde el triunfo de la revolución fue inflexible en el uso de la vivienda como garantía de pago para evitar especulación con las propiedades.
Paralelamente, y como parte del paquete de medidas, el Banco Central dio a conocer una reglamentación para que los trabajadores independientes o campesinos puedan cobrar por servicios o productos brindados a empresas o entidades estatales. De esta manera, los contratistas recibirán sus pagos en pesos cubanos en una variedad de instrumentos, desde el efectivo pasando por la transferencia bancaria, hasta la carta de crédito y la letra de cambio.

El Universal, 25 de noviembre.

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