Bogotá, 21 de diciembre. El ministro colombiano de Defensa, Gabriel Silva, al rechazar hoy la denuncia hecha el domingo por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, acerca de que un avión estadunidense no tripulado ingresó a territorio venezolano para tomar fotografías, sostuvo: “Colombia no tiene esas capacidades. De pronto fue que los soldados venezolanos confundieron el trineo de Papá Noel con un avión espía”.
El mandatario dijo que una nave incursionó a territorio venezolano por el estado de Zulia, hasta el fuerte militar Mara, cerca de la ciudad de Maracaibo, y aunque son pequeños –describió– filman por donde pasan y algunos lanzan bombas. “Avioncito de esos que aparezca, túmbenlo”, dijo el mandatario en referencia a una orden que dictó a las fuerzas armadas de su país.
Este tipo de equipos se ha convertido en un instrumento ofensivo en las guerras estadunidenses en Irak, Afganistán y Pakistán, donde servían originalmente como equipos de espionaje y ahora son utilizados para disparar proyectiles teledirigidos.
Los señalamientos de Chávez fueron parte de un análisis que el gobernante hizo sobre la activación en Colombia de seis batallones de aviación y uno de fuerzas especiales, en el contexto de un plan estratégico anunciado el sábado anterior, que por primera vez desde 1933 contempla una eventual agresión externa.
La versión de Chávez fue refutada también por el comandante de las fuerzas militares colombianas, el general Fredy Padilla, quien aseguró que las operaciones castrenses bajo su mando se realizan sólo dentro de territorio colombiano.
El militar hizo ese señalamiento sin hacer mención de que el primero de marzo de 2008, Colombia bombardeó territorio fronterizo ecuatoriano donde estaba un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, lo que desató el rompimiento bilateral de relaciones diplomáticas, apenas restablecido en noviembre, al nivel de encargados de negocios.
Padilla afirmó que Colombia no tiene aviones espías y sólo dispone de una aeronave no tripulada que vigila las torres de conducción de electricidad para prevenir ataques guerrilleros contra la infraestructura energética.
Además, apuntó, los aviones no tripulados tienen capacidad de vuelo de 40 kilómetros y por ello no pudieron estar en el lugar donde los militares venezolanos dicen haberlos visto.
Ni Silva ni Padilla se refirieron a la posibilidad de que los aviones no tripulados hayan sido enviados por militares estadunidenses que operan en Colombia desde hace años y que en agosto pasado ampliaron sus actividades a siete bases aéreas, marítimas y terrestres, con base en un nuevo acuerdo bilateral de cooperación.
En tanto, al cumplir 12 años el cautiverio de los soldados Pablo Emilio Moncayo y Josué Daniel Calvo, y que las FARC prometieron liberar desde abril, se reportó el secuestro del gobernador de Caquetá, Luis Francisco Cuéllar.
En otro orden, el presidente Uribe y el cantautor Juanes entregaron este lunes ayuda por 834 mil dólares a 300 soldados, infantes de marina y policías heridos en combate con grupos alzados en armas.
El mandatario dijo que una nave incursionó a territorio venezolano por el estado de Zulia, hasta el fuerte militar Mara, cerca de la ciudad de Maracaibo, y aunque son pequeños –describió– filman por donde pasan y algunos lanzan bombas. “Avioncito de esos que aparezca, túmbenlo”, dijo el mandatario en referencia a una orden que dictó a las fuerzas armadas de su país.
Este tipo de equipos se ha convertido en un instrumento ofensivo en las guerras estadunidenses en Irak, Afganistán y Pakistán, donde servían originalmente como equipos de espionaje y ahora son utilizados para disparar proyectiles teledirigidos.
Los señalamientos de Chávez fueron parte de un análisis que el gobernante hizo sobre la activación en Colombia de seis batallones de aviación y uno de fuerzas especiales, en el contexto de un plan estratégico anunciado el sábado anterior, que por primera vez desde 1933 contempla una eventual agresión externa.
La versión de Chávez fue refutada también por el comandante de las fuerzas militares colombianas, el general Fredy Padilla, quien aseguró que las operaciones castrenses bajo su mando se realizan sólo dentro de territorio colombiano.
El militar hizo ese señalamiento sin hacer mención de que el primero de marzo de 2008, Colombia bombardeó territorio fronterizo ecuatoriano donde estaba un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, lo que desató el rompimiento bilateral de relaciones diplomáticas, apenas restablecido en noviembre, al nivel de encargados de negocios.
Padilla afirmó que Colombia no tiene aviones espías y sólo dispone de una aeronave no tripulada que vigila las torres de conducción de electricidad para prevenir ataques guerrilleros contra la infraestructura energética.
Además, apuntó, los aviones no tripulados tienen capacidad de vuelo de 40 kilómetros y por ello no pudieron estar en el lugar donde los militares venezolanos dicen haberlos visto.
Ni Silva ni Padilla se refirieron a la posibilidad de que los aviones no tripulados hayan sido enviados por militares estadunidenses que operan en Colombia desde hace años y que en agosto pasado ampliaron sus actividades a siete bases aéreas, marítimas y terrestres, con base en un nuevo acuerdo bilateral de cooperación.
En tanto, al cumplir 12 años el cautiverio de los soldados Pablo Emilio Moncayo y Josué Daniel Calvo, y que las FARC prometieron liberar desde abril, se reportó el secuestro del gobernador de Caquetá, Luis Francisco Cuéllar.
En otro orden, el presidente Uribe y el cantautor Juanes entregaron este lunes ayuda por 834 mil dólares a 300 soldados, infantes de marina y policías heridos en combate con grupos alzados en armas.
AFP, Reuters y DPA, La jornada, 22 de diciembre.
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