Ejército en calles hasta 2112.- FCH

MONTERREY.- El Presidente Felipe Calderón afirmó ayer que, aunque pudiera estar equivocado, mantendrá la estrategia anticrimen y el Ejército seguirá en las calles hasta el último día de su mandato, el 30 de noviembre de 2012.

De visita en esta ciudad para dar un mensaje alusivo a sus cinco años de Gobierno, y tener un diálogo con representantes de la comunidad local, a Calderón se le preguntó si tenía algo de qué arrepentirse y afirmó que debió empujar más fuerte la depuración de los cuerpos policíacos, aunque algunos Gobernadores lo "alucinen".

Horas antes de que Pedro Joaquín Coldwell, nuevo dirigente del PRI, le exigiera no utilizar el tema de narcotráfico como arma electoral, el michoacano retomó el polémico discurso con el que condenó la intervención del crimen en las elecciones de Michoacán y, además de resaltar la gravedad de la situación, aclaró que no tiene tintes personales ni partidistas.

"En Michoacán -sostuvo- el crimen amenazó y bajó de la candidatura a 50 candidatos, todos del PRI, del PAN y del PRD, porque les dijeron 'o te alineas con nosotros, o te desaparecemos. Es un problema grave y no es una cosa ni personal ni partidista; es, insisto, un asunto que debe verse con ese mira de Estado".

Por lo pronto, el Jefe de Estado aseguró que la estrategia antinarco es inamovible, reconoció "excesos, errores y abusos" del Ejército y rechazó que su Gobierno haya prohijado un Estado marcado por la militarización.

"Yo tengo esta idea (la estrategia anticrimen), puedo estar equivocado y, finalmente, soy responsable de esa decisión. ¿Hasta cuándo? Hasta el 30 de noviembre de 2012: a partir del 1de diciembre de 2012 habrá otro Presidente, u otra Presidenta, y, entonces, será su responsabilidad decir si sigue o no, en la lucha contra el crimen organizado y por la seguridad", apuntó.

"Yo creo -prosiguió- que debe seguir. Pero si decide otra cosa, mi deber será respetarlo y apoyarlo, como ex Presidente..., porque, hay qué difícil es mantener apoyo del ranking. Yo respetaré lo que haga".

Si la víspera había rechazado que fuese comparado con Hitler, a raíz de la polémica que se suscitó con la denuncia interpuesta ante la Corte Penal Internacional por delitos de lesa humanidad presuntamente cometidos en su gestión, Calderón reconocería "errores, excesos y abusos" del Ejército en la lucha antinarco.

"¿Que ha habido errores? Es cierto. ¿Qué ha habido excesos? También, es cierto, por desgracia. Y estamos muy preocupados. Pero, créanme, que estos casos, dada la magnitud de las operaciones que se realizan, y de las detenciones que se hacen diariamente, son casos que más bien constituyen la excepción y no la regla
"Y aun tratándose de excepciones, no sólo las rechaza el Gobierno, sino que está decidido a perseguir y castigar, precisamente, a quien llegue a violentar la ley o los derechos humanos como por desgracia, insisto, ha ocurrido", planteó el Mandatario en el Centro Internacional de Negocios, en el Parque Fundidora.

Cuando la señorita Verónica Mireles le preguntó al Presidente si tenía algo de qué arrepentirse, éste consideró que debió "haber sido más insistente" en la depuración de las policías, "desde el primer año", pues "tratamos de ser muy políticos, muy diplomáticos y ahora los Gobernadores a veces me alucinan porque estoy dale y dale..."
Calderón reconocería también su Gobierno no supo "explicar bien" la estrategia anticrimen impulsada.

Anfitrión del ejercicio, el Gobernador Rodrigo Medina aseguró que la estrategia "ha funcionado" en Nuevo León.


Mayolo López enviado, Reforma, 9 de diciembre.