El hombre más buscado de Colombia por quien se ofrecía, una recompensa de 1.5 millones de dólares, el que sería responsable de tres mil homicidios en los últimos dieciocho meses, el que habría enviado a Estados Unidos cerca de cien toneladas de cocaína en los últimos tres años, fue capturado por la Policía ayer en la región de Urabá, departamento de Antioquia.
Daniel Rendón Herrera, Don Mario, surgido de los escuadrones paramilitares de ultraderecha, era considerado por el presidente Álvaro Uribe el narcotraficante más buscado del país, tanto que su captura fue exigida en público y en privado al director de la Policía Nacional, general Óscar Naranjo.
Para notificarle que la orden estaba cumplida, el general Naranjo llamó a Uribe a Brasil, donde participaba en el Foro Económico Mundial. Así le contó que luego de más de seis meses de seguimiento, fue encontrado por 200 hombres Jungla de la Policía Antinarcóticos, en un sitio conocido como Cerro Azul, jurisdicción de Turbo.
“Fue encontrado como un perro, abrazado a una palma y comiendo con las manos un poco de arroz que era lo único que le quedaba. Esto es un mensaje para todos los narcotraficantes en el sentido de que cualquier cosa que hagan, tarde o temprano, van a ser capturados”, aseguró el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, quien anunció que una persona recibiría parte de la recompensa prometida por la captura de Don Mario.
Versiones extraoficiales señalan que el operativo se dio porque Don Mario fue visto durante la Semana Santa, en el corregimiento El Tres, de Turbo. Al parecer, llegó allí buscando a un médico que lo atendiera porque su fama de hipocondriaco es reconocida entre los narcotraficantes.
¿Pero qué hacía tan peligroso a Don Mario en un país donde los jefes narcos son fácilmente reemplazados?
Parte de su poder radica en ser el responsable de reactivar las estructuras paramilitares y las rutas de tráfico que había dejado su hermano John Freddy Rendón, El Alemán, ex comandante del bloque Élmer Cárdenas de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
De acuerdo con la Policía, Don Mario tenía cerca de mil 500 hombres a su mando y con ellos trató de dar vida a las Autodefensas Gaitanistas, un grupo que extendió amenazas con volantes en más de diez departamentos.
Don Mario siempre fue desconfiado y prefería andar con una escolta reducida. Cuando se conoció su captura se dijo que andaba con 30 hombres de seguridad, lo cierto es que cuatro hombres eran los encargados de protegerlo y solo uno de ellos fue capturado. En cuanto a su sucesor, el general Naranjo teme que este se defina con una guerra interna que dejará muchos muertos.
Daniel Rendón Herrera, Don Mario, surgido de los escuadrones paramilitares de ultraderecha, era considerado por el presidente Álvaro Uribe el narcotraficante más buscado del país, tanto que su captura fue exigida en público y en privado al director de la Policía Nacional, general Óscar Naranjo.
Para notificarle que la orden estaba cumplida, el general Naranjo llamó a Uribe a Brasil, donde participaba en el Foro Económico Mundial. Así le contó que luego de más de seis meses de seguimiento, fue encontrado por 200 hombres Jungla de la Policía Antinarcóticos, en un sitio conocido como Cerro Azul, jurisdicción de Turbo.
“Fue encontrado como un perro, abrazado a una palma y comiendo con las manos un poco de arroz que era lo único que le quedaba. Esto es un mensaje para todos los narcotraficantes en el sentido de que cualquier cosa que hagan, tarde o temprano, van a ser capturados”, aseguró el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, quien anunció que una persona recibiría parte de la recompensa prometida por la captura de Don Mario.
Versiones extraoficiales señalan que el operativo se dio porque Don Mario fue visto durante la Semana Santa, en el corregimiento El Tres, de Turbo. Al parecer, llegó allí buscando a un médico que lo atendiera porque su fama de hipocondriaco es reconocida entre los narcotraficantes.
¿Pero qué hacía tan peligroso a Don Mario en un país donde los jefes narcos son fácilmente reemplazados?
Parte de su poder radica en ser el responsable de reactivar las estructuras paramilitares y las rutas de tráfico que había dejado su hermano John Freddy Rendón, El Alemán, ex comandante del bloque Élmer Cárdenas de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
De acuerdo con la Policía, Don Mario tenía cerca de mil 500 hombres a su mando y con ellos trató de dar vida a las Autodefensas Gaitanistas, un grupo que extendió amenazas con volantes en más de diez departamentos.
Don Mario siempre fue desconfiado y prefería andar con una escolta reducida. Cuando se conoció su captura se dijo que andaba con 30 hombres de seguridad, lo cierto es que cuatro hombres eran los encargados de protegerlo y solo uno de ellos fue capturado. En cuanto a su sucesor, el general Naranjo teme que este se defina con una guerra interna que dejará muchos muertos.
Clara Isabel Vélez Rincón en Medellín, Milenio, 16 de abril.
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