El activista anticastrista Luis Posada Carriles fue inculpado este jueves en un tribunal de Texas (sur de EU) acusado de mentir a la justicia sobre su rol en atentados con bomba en La Habana en 1997, y será juzgado a partir del 10 de agosto. Se trata de la primera vez que Posada Carriles, que será instruido de cargos en una audiencia prevista para el 17 de abril en El Paso (Texas) es acusado en Estados Unidos de estar viculado a los atentados.
Cuba lo acusó de haber planeado, en 1997, atentados contra hoteles de La Habana y Varadero que dejaron un muerto, y de haber intentado asesinar al líder cubano Fidel Castro durante la Cumbre Iberoamericana de 2000 en Panamá. Según la inculpación, que comprende once cargos, Posada Carriles hizo declaraciones “falsas” a la justicia acerca de “su involucramiento en solicitar a otros individuos llevar a cabo esos atentados con bomba en Cuba”. Conforme a la decisión del juez, su juicio se iniciará el 10 de agosto en El Paso tras la selección de jurado prevista el mismo día. Posada Carriles, de 81 años, anticastrista de origen cubano, fue detenido en 2005 en Texas por cargos migratorios y liberado en mayo de 2007. Se hizo entonces caso omiso de los pedidos de extradición de Venezuela, de cuyas cárceles escapó en 1985 cuando era procesado acusado de planear la voladura de un avión comercial de la compañía Cubana de Aviación en 1976, que dejó 73 muertos, para reaparecer como “asesor” militar en la base de Ilopango, en El Salvador. “Venezuela piensa que esto es un primer paso, porque es la primera vez que lo vinculan con terrorismo”, declaró el abogado que representa al gobierno venezolano ante las autoridades estadunidenses, José Pertierra.
“Los procuradores del ministerio público de EU precisaron que el acusado no dijo la verdad acerca del mercenario salvadoreños Raúl Cruz León, que llevó explosivos a Cuba para atentar contra instalaciones turística”, informó la agencia Prensa Latina, en La Habana. Confeso ante los tribunales cubanos, Cruz León fue condenado a muerte por fusilamiento, pero cumple cadena perpetua aquí por una moratoria de la pena capital que dictó el gobierno cubano. El diario oficial Granma calificó de “sorpresivo” el anuncio de la fiscalía y dijo que ello obedece a “una revisión de estrategia ante las repetidas solicitudes de extradición presentadas por el gobierno de Venezuela, a pocos días de comenzar la Cumbre de las Américas, donde el tema será inevitablemente mencionado”.
Por otra parte, opositores cubanos pidieron en una carta divulgada este lunes al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que garantice que los fondos que Washington otorga a la disidencia interna lleguen a su destino o los asigne a “otros objetivos”. “Si el gobierno de EU no puede garantizar en lo adelante que la ayuda para la promoción de la democracia en Cuba llegue realmente, de manera prioritaria (...) al interior de nuestro país, entonces será mejor retirar esos fondos y emplearlos en otros objetivos”, señalaron en una misiva dirigida a Obama.
En el documento, firmado por varios disidentes, entre ellos los ex presos políticos Elizardo Sánchez y Héctor Palacios, consideran “escandaloso y fraudulento que la mayor parte de dichos recursos, que provienen del contribuyente estadunidense, salvo honrosas excepciones, se ha gastado o malgastado de manera caprichosa e irresponsable”. “En ocasiones, esa asistencia ha servido para satisfacer determinanas agendas políticas excluyentes que han tratado y tratan de dividir a la resistencia democrática interna” y “se han utilizado en el exterior en iniciativas o propósitos que nada tienen que ver con el principal objetivo”, apuntaron.
Cuba lo acusó de haber planeado, en 1997, atentados contra hoteles de La Habana y Varadero que dejaron un muerto, y de haber intentado asesinar al líder cubano Fidel Castro durante la Cumbre Iberoamericana de 2000 en Panamá. Según la inculpación, que comprende once cargos, Posada Carriles hizo declaraciones “falsas” a la justicia acerca de “su involucramiento en solicitar a otros individuos llevar a cabo esos atentados con bomba en Cuba”. Conforme a la decisión del juez, su juicio se iniciará el 10 de agosto en El Paso tras la selección de jurado prevista el mismo día. Posada Carriles, de 81 años, anticastrista de origen cubano, fue detenido en 2005 en Texas por cargos migratorios y liberado en mayo de 2007. Se hizo entonces caso omiso de los pedidos de extradición de Venezuela, de cuyas cárceles escapó en 1985 cuando era procesado acusado de planear la voladura de un avión comercial de la compañía Cubana de Aviación en 1976, que dejó 73 muertos, para reaparecer como “asesor” militar en la base de Ilopango, en El Salvador. “Venezuela piensa que esto es un primer paso, porque es la primera vez que lo vinculan con terrorismo”, declaró el abogado que representa al gobierno venezolano ante las autoridades estadunidenses, José Pertierra.
“Los procuradores del ministerio público de EU precisaron que el acusado no dijo la verdad acerca del mercenario salvadoreños Raúl Cruz León, que llevó explosivos a Cuba para atentar contra instalaciones turística”, informó la agencia Prensa Latina, en La Habana. Confeso ante los tribunales cubanos, Cruz León fue condenado a muerte por fusilamiento, pero cumple cadena perpetua aquí por una moratoria de la pena capital que dictó el gobierno cubano. El diario oficial Granma calificó de “sorpresivo” el anuncio de la fiscalía y dijo que ello obedece a “una revisión de estrategia ante las repetidas solicitudes de extradición presentadas por el gobierno de Venezuela, a pocos días de comenzar la Cumbre de las Américas, donde el tema será inevitablemente mencionado”.
Por otra parte, opositores cubanos pidieron en una carta divulgada este lunes al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que garantice que los fondos que Washington otorga a la disidencia interna lleguen a su destino o los asigne a “otros objetivos”. “Si el gobierno de EU no puede garantizar en lo adelante que la ayuda para la promoción de la democracia en Cuba llegue realmente, de manera prioritaria (...) al interior de nuestro país, entonces será mejor retirar esos fondos y emplearlos en otros objetivos”, señalaron en una misiva dirigida a Obama.
En el documento, firmado por varios disidentes, entre ellos los ex presos políticos Elizardo Sánchez y Héctor Palacios, consideran “escandaloso y fraudulento que la mayor parte de dichos recursos, que provienen del contribuyente estadunidense, salvo honrosas excepciones, se ha gastado o malgastado de manera caprichosa e irresponsable”. “En ocasiones, esa asistencia ha servido para satisfacer determinanas agendas políticas excluyentes que han tratado y tratan de dividir a la resistencia democrática interna” y “se han utilizado en el exterior en iniciativas o propósitos que nada tienen que ver con el principal objetivo”, apuntaron.
AFP y Manuel Juan Somoza en La Habana, Milenio, 10 de abril.
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