Caracas, 23 de enero. Los defensores de los dos modelos políticos venezolanos del último medio siglo salieron hoy a las calles de esta capital a dar una demostración de su capacidad de convocatoria, con miras a las elecciones legislativas de septiembre próximo y a los comicios presidenciales de 2012, para los cuales ratificó hoy su postulación el presidente Hugo Chávez.
El Partido Socialista Unido de Venezuela y las fuerzas de oposición, encabezadas por estudiantes, realizaron manifestaciones paralelas en la fecha en que los venezolanos celebran la caída de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez (1948-1958), que luego dio paso a la formación de un régimen político en que democristianos y socialdemócratas se alternaron en el poder, hasta que los escándalos de corrupción propiciaron el ascenso en 1999 del movimiento bolivariano de Chávez.
Al frente de la llamada “marea roja” marchó el ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello, pero al concluir la movilización en el centro de Caracas, Chávez anunció el inicio de una campaña política que no sólo incluirá la renovación de la Asamblea Nacional este año, sino también de la presidencia, en diciembre de 2012.
“Desde ya este soldado es precandidato a las presidenciales”, dijo Chávez antes de pedir a la oposición que “saque al ruedo” a su contendiente.
“Si Dios quiere y ustedes también y yo estoy en plenas condiciones, y me cuidaré para estar en plenas condiciones, en diciembre de 2012 le espera a la oposición otro nocaut. Desde ahora se los aviso, la campaña admirable será de tres años, 2010, 2011 y 2012”, afirmó el mandatario, quien desde que ganó el 6 de diciembre de 2006 anticipó que buscaría la relección para un tercer mandato.
Chávez definió como prioridad inmediata la reconquista de una mayoría absoluta en el Parlamento unicameral, que renueva legislaturas cada cinco años, y destacó que para ello los socialistas deben ser leales a su liderazgo.
“Los que quieran patria vengan con Chávez porque vamos haciendo patria. Exijo lealtad absoluta a mi liderazgo porque yo no soy yo, yo soy un pueblo y al pueblo se le respeta. Y yo estoy obligado a defender a un pueblo que amo”, puntualizó el mandatario.
Los opositores, que no se presentaron a las legislativas de 2005, que fracasaron en la revocación del mandato de Chávez en 2004 y llegaron divididos a la presidencial de 2006, mostraron hoy optimismo en las calles del este de Caracas, orgullosos de haber recuperado terreno en los comicios locales y estatales de 2008.
En la vanguardia de su columna de manifestantes portaron una pancarta con una leyenda beisbolera: “Chávez estás ponchao”. En la concentración final, Julio Borges, líder del partido Primero Justicia, pronosticó que “2010 es el año del cambio”.
El Partido Socialista Unido de Venezuela y las fuerzas de oposición, encabezadas por estudiantes, realizaron manifestaciones paralelas en la fecha en que los venezolanos celebran la caída de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez (1948-1958), que luego dio paso a la formación de un régimen político en que democristianos y socialdemócratas se alternaron en el poder, hasta que los escándalos de corrupción propiciaron el ascenso en 1999 del movimiento bolivariano de Chávez.
Al frente de la llamada “marea roja” marchó el ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello, pero al concluir la movilización en el centro de Caracas, Chávez anunció el inicio de una campaña política que no sólo incluirá la renovación de la Asamblea Nacional este año, sino también de la presidencia, en diciembre de 2012.
“Desde ya este soldado es precandidato a las presidenciales”, dijo Chávez antes de pedir a la oposición que “saque al ruedo” a su contendiente.
“Si Dios quiere y ustedes también y yo estoy en plenas condiciones, y me cuidaré para estar en plenas condiciones, en diciembre de 2012 le espera a la oposición otro nocaut. Desde ahora se los aviso, la campaña admirable será de tres años, 2010, 2011 y 2012”, afirmó el mandatario, quien desde que ganó el 6 de diciembre de 2006 anticipó que buscaría la relección para un tercer mandato.
Chávez definió como prioridad inmediata la reconquista de una mayoría absoluta en el Parlamento unicameral, que renueva legislaturas cada cinco años, y destacó que para ello los socialistas deben ser leales a su liderazgo.
“Los que quieran patria vengan con Chávez porque vamos haciendo patria. Exijo lealtad absoluta a mi liderazgo porque yo no soy yo, yo soy un pueblo y al pueblo se le respeta. Y yo estoy obligado a defender a un pueblo que amo”, puntualizó el mandatario.
Los opositores, que no se presentaron a las legislativas de 2005, que fracasaron en la revocación del mandato de Chávez en 2004 y llegaron divididos a la presidencial de 2006, mostraron hoy optimismo en las calles del este de Caracas, orgullosos de haber recuperado terreno en los comicios locales y estatales de 2008.
En la vanguardia de su columna de manifestantes portaron una pancarta con una leyenda beisbolera: “Chávez estás ponchao”. En la concentración final, Julio Borges, líder del partido Primero Justicia, pronosticó que “2010 es el año del cambio”.
La Jornada, 24 de enero.
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