'Muchos quisieran viajar en avión'

 El empleado de Aeromar Óscar Aguirre se extraña, recibe el pase de abordar del candidato del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, y le autoriza el ingreso hacia el área de plataforma del Aeropuerto capitalino.

Es la primera vez que este joven de 21 años conoce en persona al tabasqueño a quien ha visto en televisión.

"Lo veo tranquilo, normal, sencillo, muchos pasajeros de este tipo de clases que acostumbran a volar, diputados, senadores, sí piden un trato especial y él en ningún momento se hizo notar", comenta Óscar.

Acompañado por su coordinador de prensa César Yáñez, López Obrador llega a la terminal área para abordar un vuelo a Xalapa.

Luce guayabera blanca y pantalón azul marino, y carga una chamarra negra; ingresa por la puerta 8 de la Terminal 2 sin protagonismos, incluso pasa inadvertido.

A diferencia de funcionarios públicos, personalidades o cantantes, a quienes se les da trato preferente revisándolos en un punto de inspección especial, el candidato atraviesa el filtro de rutina.

Es revisado y escaneado por personal de seguridad privada, mientras que dos policías federales vestidos de civil le dan la bienvenida y le piden posar junto a ellos: "Don Andrés una foto por favor".

Con seriedad y un dejo de cansancio, López Obrador acepta, se coloca enmedio de ellos y sonríe.

El perredista se sienta en la sala de última espera 75 y varios pasajeros lo reconocen, sacan sus celulares y cámaras para solicitarle una pose frente al flash.

Así pasa un hombre de bermudas, un matrimonio, un ejecutivo, un ama de casa; en menos de 15 minutos, una veintena de personas se retratan junto a él.

Marco, un capitalino, hasta levanta el brazo en señal de victoria para que su acompañante le toma la foto. Otra joven conversa con él brevemente y enciende su BlackBerry para que quede testimonio de la charla.

Los discretos captan la imagen de recuerdo desde lejos, unos más sólo miran la escena, indiferentes.

Por la mañana, el candidato presidencial dijo que es una irresponsabilidad que se utilicen estas aeronaves y se derrochen recursos en ello, cuando hay muchas carencias entre la población.

"Es un acto de irresponsabilidad que se haga campaña en aviones privados de lujo, porque no es cualquier avioneta, se trata de aviones de primera con todos los servicios, se llega a los aeropuertos en los estados y de ahí se utilizan helicópteros pera ir a comunidades indígenas.

"Eso demuestra mucha insensibilidad y mucha irresponsabilidad, viven en otro mundo estos candidatos, es ofensivo ante la pobreza que hay en el País y ante las necesidades que tiene la gente", expresó en su conferencia matutina.

Los altavoces de la terminal aérea anuncian la salida del vuelo 324 de Aeromar con destino a la localidad veracruzana, López Obrador se pone de pie y camina hacia donde se encuentra el empleado de Aeromar.

"Siempre lo he hecho así, no es nuevo de la campaña, recorrí todo el País en estos cinco años y lo hice así, nunca he viajado ni siquiera en primera clase; a veces, muy amablemente, los capitanes de los aviones, el personal, me invita a que pase a ocupar esos lugares, pero les agradezco, muy amables, pero no, estoy bien.

"Muchos mexicanos quisieran viajar en avión, muchos mexicanos que nunca han viajado así", cierra la plática para enfilarse al mostrador.

Para las 14:45 horas, el perredista sube al camión que lo llevará a la aeronave en donde ocupará el asiento 3D, va en compañía de su hijo y su equipo de campaña, así como una decena de reporteros que siguen su gira proselitista.

Con información de Mariel Ibarra, Reforma, 18 de abril.

0 Responses to "'Muchos quisieran viajar en avión'"