Exhiben trampa en candidaturas de PRD

La perredista Yndira Sandoval puso nerviosos por varias semanas a dirigentes del PRD al impugnar sus candidaturas al Senado ante el Tribunal Electoral federal y denunciar su inelegibilidad.

La militante, de 26 años, evidenció ante los magistrados la irregularidad de los aspirantes, que consistió en no renunciar a su cargo en la dirigencia nacional del partido y ser postulados pese a que la norma no lo permite.

"Separarse mediante licencia o renuncia del cargo como integrante del Secretariado Nacional o Comité Ejecutivo en cualquiera de sus ámbitos, al momento de la fecha de registro interno del partido", establece el artículo 281 de los Estatutos del PRD.

De los 7 primeros lugares de la lista nacional al Senado, en cuatro aparecen integrantes de la dirigencia nacional perredista: la secretaria general, Dolores Padierna, quien ocupa la cuarta posición, mientras que Miguel Barbosa, Luis Sánchez y Amador Jara, sembrados en el primero, tercero y séptimo lugares, respectivamente, son miembros de la Comisión Política Nacional.

Aunque la Sala Superior desestimó los recursos de Yndira, al considerar que el proceso fue extemporáneo, no entró al fondo del asunto.

Antes de la resolución, integrantes de la Comisión Política Nacional (CPN) admitieron su preocupación, pues si el Tribunal analizaba la acusación sobre violación al estatuto, preveían la anulación de sus candidaturas.

"No pensamos en ese escenario (el recurso ante el Tribunal), porque la lista se construyó entre todas las corrientes y, al ser un acuerdo político, jamás pensamos en que sería impugnado, pero la falta existe", dijo un integrante de la CPN.

Los cuatro integrantes consultados admitieron que se pidió a Foro Nuevo Sol, corriente a la que pertenecía Sandoval, convencerla para desistir de su queja.

En entrevista, la perredista aseguró que durante un mes le exigieron retirar la impugnación, e incluso le propusieron ser candidata a diputada. Al no aceptar, la expulsaron de la corriente.

"No seguí sus reglas porque considero que este es un asunto de legalidad y de ética, y lamento que el Tribunal no vea esta ilegalidad", dijo Sandoval.


Érika Hernández, Reforma, 30 de abril.