'¿Qué se siente ir en tercer lugar?'

"¿Qué se siente ir en tercer lugar?", se lee de pronto en la proyección de la pantalla de Twitter desplegada en una de las paredes del salón Tamayo del Club de Industriales.

Es la presentación de las 40 propuestas del Centro Mexicano de Derecho Ambiental para la siguiente administración federal, y Josefina Vázquez Mota es la primera de los candidatos presidenciales en comparecer ante los ambientalistas en el mismo lugar donde se reúnen los hombres más ricos del País.

Hace ya tres semanas que el nuevo formato de los eventos de "La Jefa", como le ha rebautizado su equipo de campaña después de una accidentada primer semana de eventos, les permite prever casi todo tipo de irrupciones incómodas.

Pero la logística tipo "Los Pinos", que evita las entrevistas banqueteras y pone cordones de seguridad para que nadie se atraviese a su paso, parece no haber contemplado a esta red social y su tiempo real.

"Por favor que diga si Limón es su asesor", cuestiona otra cibernauta que ha dado con el hashtag "#preguntaleajosefina".

De vez en cuando la candidata, que viste un traje sastre color perla con una especie de flor aqua en la solapa, voltea curiosa a la pared, pero no advierte que en la ristra de preguntas ambientales se cuela uno que otro comentario incómodo.

Se pone los lentes y hace apuntes cuando el director del CEMDA, Gustavo Alanís Ortega, lee un pliego petitorio que incluye designar como titular de la Semarnat a un especialista de renombre, y no a un político.

Otro comentario se estampa en la pared que sirve de pantalla en el salón contemporáneo de alto techo cuadriculado.

"Sería interesante saber en quién está pensando para la Semarnat, que miedo que no sepa", suelta otro usuario.

Dos hombres de traje que llevan legajos en las manos -uno de ellos intervino rápidamente cuando el micrófono de Vázquez Mota empezó a fallar haciendo que la candidata se escuchara entrecortada- han advertido el incidente virtual.

Segundos después, los cuestionamientos desaparecen en la pantalla y en su lugar se despliegan los tweets que repiten el discurso de la candidata, quien ofrece incluir en su plataforma de gobierno todas y cada una de las 40 propuestas.

"El equipo de JVM borra twits que se proyectan en el salón", se lee en el último mensaje incómodo proyectado en la pared, "lo acabo de ver".

La intención expresa del CEMDA de hacer partícipes del encuentro a los cibernautas para cuestionar a la candidata "exclusivamente sobre temas ambientales" ha sido rebasada por la fiebre electoral.

El encuentro termina, Vázquez Mota se levanta y los elementos del Estado Mayor Presidencial la rodean para evitar que la turba de reporteros la aborde, apenas dos frases cortadas y los hombres de traje y chícharo al oído logran una valla impenetrable que envidiaría cualquier mariscal de campo.

"¿Me permiten pasar?", pide la panista.

Un evento más sin interrupciones, gritos o cuestionamientos en voz alta, pero qué pasaría si las paredes hablaran...


Osvaldo Robles, Reforma, 25 de abril.

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