La eventual militarización en la frontera norte y el actual incremento de agentes de la Patrulla Fronteriza (además de la amenaza del crimen organizado) están obligando a los migrantes a internarse a lugares cada vez más peligrosos para cruzar a Estados Unidos.
Enrique Morones, fundador de la asociación Ángeles de la Frontera, que auxilia a migrantes en el desierto de Arizona, dijo que las medidas contra el narcotráfico como la militarización y el incremento de agentes fronterizos están aumentando las muertes de migrantes.
Apuntó que con ello también se ha incrementado la agresión y violencia contra los migrantes detenidos.
El activista ejemplificó que la Patrulla Fronteriza considera que tres de cada cuatro migrantes, que pretenden entrar a ese país, son criminales, lo que agrava la violencia y agresiones contra los indocumentados, “creen que dentro de sus mochilas traen drogas o armas, y sólo traen agua y comida para sobrevivir”.
Morones aseguró que : “entre más militarización en la frontera más muertes porque los indocumentados están forzados a pasar por áreas más peligrosas”.
De acuerdo a la Coalición de los Derechos Humanos de Arizona, el número de restos de indocumentados que no han podido ser identificados ha aumentado considerablemente en el presente año fiscal en la frontera.
En total, en menos de seis meses en el año fiscal, se han recuperado en el desierto de Arizona 50 cuerpos de migrantes.
Desde el 1 de octubre de 2008 al 28 de marzo pasado se han encontrado los 50 cuerpos, 21 de los cuales el médico forense no ha podido determinar el sexo de los restos debido al alto grado de descomposición o porque se trata de osamentas incompletas, porque “fueron víctimas de animales”.
“El año pasado durante las mismas fechas solamente se habían registrado cinco casos como éste”, en la zona de Arizona, dijo Kat Rodríguez, vocera de la coalición.
Las estadísticas están basadas en información proporcionada por las oficinas del forense en el condado Pima, Yuma y Cochise, dijo la activista.
En tanto, Morones puntualizó que los cuerpos encontrados en el desierto se hallan en estado avanzado de descomposición, “a otros, los localizan abrazados a otros cuerpos; a niños abrazados de sus madres…”.
Para Kat Rodríguez, el incremento de osamentas puede ser una señal de que los indocumentados están siendo obligados a cruzar por lugares cada vez más aislados, en áreas donde es muy difícil, incluso, recuperar sus cuerpos.
“Los inmigrantes repatriados con regularidad cuentan que vieron cadáveres y osamentas en las rutas que siguen en el intento para entrar a los Estados Unidos”, advirtió Claudia Smith de la organización: California Rural Legal Assistance Foundation.
Mónica Oropeza, de la Coalición Pro Defensa de los Inmigrantes, recordó que en 1994 cuando inició el Operativo Guardián, para desviar el tráfico de indocumentados, aumentó dramáticamente el número de inmigrantes muertos, en su mayoría por las altas temperaturas en el desierto.
Enrique Morones, fundador de la asociación Ángeles de la Frontera, que auxilia a migrantes en el desierto de Arizona, dijo que las medidas contra el narcotráfico como la militarización y el incremento de agentes fronterizos están aumentando las muertes de migrantes.
Apuntó que con ello también se ha incrementado la agresión y violencia contra los migrantes detenidos.
El activista ejemplificó que la Patrulla Fronteriza considera que tres de cada cuatro migrantes, que pretenden entrar a ese país, son criminales, lo que agrava la violencia y agresiones contra los indocumentados, “creen que dentro de sus mochilas traen drogas o armas, y sólo traen agua y comida para sobrevivir”.
Morones aseguró que : “entre más militarización en la frontera más muertes porque los indocumentados están forzados a pasar por áreas más peligrosas”.
De acuerdo a la Coalición de los Derechos Humanos de Arizona, el número de restos de indocumentados que no han podido ser identificados ha aumentado considerablemente en el presente año fiscal en la frontera.
En total, en menos de seis meses en el año fiscal, se han recuperado en el desierto de Arizona 50 cuerpos de migrantes.
Desde el 1 de octubre de 2008 al 28 de marzo pasado se han encontrado los 50 cuerpos, 21 de los cuales el médico forense no ha podido determinar el sexo de los restos debido al alto grado de descomposición o porque se trata de osamentas incompletas, porque “fueron víctimas de animales”.
“El año pasado durante las mismas fechas solamente se habían registrado cinco casos como éste”, en la zona de Arizona, dijo Kat Rodríguez, vocera de la coalición.
Las estadísticas están basadas en información proporcionada por las oficinas del forense en el condado Pima, Yuma y Cochise, dijo la activista.
En tanto, Morones puntualizó que los cuerpos encontrados en el desierto se hallan en estado avanzado de descomposición, “a otros, los localizan abrazados a otros cuerpos; a niños abrazados de sus madres…”.
Para Kat Rodríguez, el incremento de osamentas puede ser una señal de que los indocumentados están siendo obligados a cruzar por lugares cada vez más aislados, en áreas donde es muy difícil, incluso, recuperar sus cuerpos.
“Los inmigrantes repatriados con regularidad cuentan que vieron cadáveres y osamentas en las rutas que siguen en el intento para entrar a los Estados Unidos”, advirtió Claudia Smith de la organización: California Rural Legal Assistance Foundation.
Mónica Oropeza, de la Coalición Pro Defensa de los Inmigrantes, recordó que en 1994 cuando inició el Operativo Guardián, para desviar el tráfico de indocumentados, aumentó dramáticamente el número de inmigrantes muertos, en su mayoría por las altas temperaturas en el desierto.
Mariana Viayra Ramírez, Crónica, 8 de abril.
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