El gobierno federal aseguró ayer que la participación de las fuerzas armadas en contra del narcotráfico y el crimen organizado "tiene calendario", es decir, no tiene un efecto permanente, ya que cumplen "con un deber que no les es natural, sino extraordinario para dar tiempo al sistema a reconstruirse".
Fernando Gómez Mont, secretario de Gobernación, dijo lo anterior al inaugurar los trabajos de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, en donde dijo que todos los órdenes de gobierno, pero sobre todo los responsables de los órganos de seguridad, tienen el deber de apurar, entre todos, ese calendario de las fuerzas armadas.
Al respecto, el secretario técnico del Consejo Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, sostuvo que "es necesario que los gobiernos estatales y municipales recuperen el pleno control de sus corporaciones policiales", a fin de cumplir su parte alícuota (proporcional) en la lucha contra la inseguridad.
El propio Rubido había adelantado algo al respecto el domingo pasado, al resaltar la necesidad de que las autoridades estatales y municipales "vayan retomando, con el acompañamiento del gobierno federal, el control directo de sus áreas de seguridad pública".
Ayer, ante 62 alcaldes —dos por cada entidad—y dos jefes delegacionales del DF —electos en votación semanas atrás—, así como el secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, el titular de Gobernación admitió que la violencia que ataca al país "es una amenaza indubitable e insoslayable al régimen de libertades y derechos que los mexicanos reclaman y exigen".
Fernando Gómez Mont, secretario de Gobernación, dijo lo anterior al inaugurar los trabajos de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, en donde dijo que todos los órdenes de gobierno, pero sobre todo los responsables de los órganos de seguridad, tienen el deber de apurar, entre todos, ese calendario de las fuerzas armadas.
Al respecto, el secretario técnico del Consejo Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, sostuvo que "es necesario que los gobiernos estatales y municipales recuperen el pleno control de sus corporaciones policiales", a fin de cumplir su parte alícuota (proporcional) en la lucha contra la inseguridad.
El propio Rubido había adelantado algo al respecto el domingo pasado, al resaltar la necesidad de que las autoridades estatales y municipales "vayan retomando, con el acompañamiento del gobierno federal, el control directo de sus áreas de seguridad pública".
Ayer, ante 62 alcaldes —dos por cada entidad—y dos jefes delegacionales del DF —electos en votación semanas atrás—, así como el secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, el titular de Gobernación admitió que la violencia que ataca al país "es una amenaza indubitable e insoslayable al régimen de libertades y derechos que los mexicanos reclaman y exigen".
Luciano Franco, Crónica, 15 de abril.
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