En medio de la crisis económica que atraviesa este país caribeño y ante el alza del precio mundial del hoy llamado "oro blanco", los directivos cubanos del sector aseguran que la Isla mejorará los resultados.
"Estamos en mejor situación que en igual fecha del pasado año para desarrollar la próxima zafra", declaró el titular de la cartera, Luis Manuel Ávila, con motivo del Día del Trabajador Azucarero, el 13 de octubre.
Hace 49 años, la Revolución aplicó la ley 890 para poner en manos del pueblo 160 centrales azucareras y 16 refinerías, como parte de lo que denominó como un rescate para la nación de un alto número de empresas.
Pero entre 2002 y 2004, el Gobierno redujo el cultivo de 2 millones de hectáreas a 750 mil; cerró más de la mitad de las 156 centrales, dejando activas sólo 61.
Esta reestructuración de la industria azucarera estatal se debió -según explicó el entonces Presidente Fidel Castro- a que los bajos precios internacionales hacían improductivos el cultivo y fabricación del dulce.
Ahora, por el contrario, su valor mundial ronda los 25 centavos de dólar por libra, el mayor en casi tres décadas. De 0.13 o 0.14 por libra el año pasado se pasó la barrera psicológica de los 25 centavos, algo que no sucedía desde 1981. Y la Organización Internacional del Azúcar señaló que hasta septiembre de 2010, la demanda global de producto superará a la producción por 5 millones de toneladas métricas.
Pero la Isla la tiene difícil para recuperar la posición perdida como país exportador de azúcar, según expertos.
"En las condiciones cubanas, la caña requiere entre 14 y 16 meses para crecer, por lo tanto no puede haber incrementos espectaculares, ni siquiera de un año a otro", advirtió el mismo viceministro del Azúcar, Nelson Labrada.
A la necesidad de modernizar fábricas y maquinaria, se unen los daños provocados por los desastres naturales, cada vez más frecuentes. Tres huracanes dañaron cientos de miles de cañaverales a fines de 2008 y con gran esfuerzo el país logró producir lo mismo que el año anterior: 1.4 millones de toneladas de azúcar, para una facturación de 600 millones de dólares. La cantidad queda muy debajo de los 8 millones de toneladas logradas en los 70 y de los 4 mil millones de dólares que ingresaban al país cuando abastecía al bloque socialista del Este europeo.
El bloqueo económico de Washington a Cuba también provoca daños millonarios en un sector que, según sus directivos, sigue siendo importante para garantizar el autoabastecimiento y como base para la industria del ron y derivados, que en 2008 facturó 55 millones de dólares, de acuerdo con datos oficiales, y según expertos locales puede triplicar la cifra sin las sanciones de Estados Unidos.
Las pérdidas generales provocadas por el bloqueo suman un promedio anual de 100 millones de dólares, según el viceministro Labrada.
Las sanciones estadounidenses suponen además un incremento de gastos cercano a 35 por ciento como promedio, ya que fuerza al país a buscar en mercados lejanos europeos y asiáticos los fertilizantes, herbicidas y maquinaria que no puede comprar a Estados Unidos, y encarece los fletes.
Cae la producción
La industria del azúcar en Cuba, hoy en crisis y en espera de un repunte, vivió una época de oro durante los años 70, cuando surtía del dulce al hoy desaparecido bloque soviético.
- 160 centrales azucareras había en 1959.
- 61 centrales azucareras quedaban en 2004.
- 8 millones de toneladas de azúcar se fabricaron en los 70.
- 1.4 millones fue el monto de la producción en 2008.
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