Felipe Calderón dice ya basta y les exige a cumplir con Hacienda

Por segundo día consecutivo, el presidente Felipe Calderón hizo hincapié en la vulnerabilidad de las finanzas públicas y arremetió contra los grandes corporativos, a quienes exigió cumplir con la ley y pagar impuestos.

Reunido con integrantes de la industria química, el mandatario dijo que no les pide sacrificios extremos o que paguen más, pero “es inaceptable que los grandes corporativos solamente contribuyan con el 1.7 de impuestos durante varios años”.

Enérgico, puntualizó: “¡Esto ya no puede ser! Está bien que tengan actividades filantrópicas y que patrocinen eventos deportivos y culturales, y que nos regalen equipos médicos, pero que también paguen, aunque sea una parte de los impuestos que necesitan los mexicanos”.

El Ejecutivo afirmó que para un gobernante “no hay cosa que más duela, que más lastime, que más entristezca, que tener que pedirle a la población, precisamente, un esfuerzo recaudatorio para poder evitar un riesgo mayor a la economía del país”.

Acompañado del Premio Nobel Mario Molina y de la titular de Energía, Georgina Kessel, subrayó que el gobierno realiza su parte de ahorro, y como muestra mencionó que se han congelado los salarios de los servidores públicos, se propuso la desaparición de tres secretarías y se recortó el gasto en diversas áreas.

Insistió en que la caída en la producción de petróleo aparejada con los efectos que sobre nuestra economía tuvo la crisis financiera internacional, nos provocó un golpe a las finanzas públicas de casi 400 mil millones de pesos; es decir, casi cuatro puntos del PIB, que requiere el esfuerzo de todos para ser subsanado.

“La vulnerabilidad del país es muy alta, no es que lo diga el Presidente de la República, ustedes pueden examinar el comportamiento del tipo de cambio, del riesgo país, de los bonos mexicanos, los comentarios de las calificadoras de inversión, que claramente saben que tenemos un golpe en las finanzas públicas severo y sin precedentes”, refirió, luego de realizar una breve comparación con la crisis que le tocó al ex presidente Ernesto Zedillo.

Por ello, refrendó su petición de que los empresarios paguen lo justo y comprometió la apertura del gobierno federal para “escuchar la problemática específica, empresa por empresa o sector por sector, si es necesario, y estaremos siempre dispuestos a dar y hacer un esfuerzo adicional más para poder sacar al país adelante”.

El presidente Calderón admitió que si bien estas no son decisiones fáciles para los gobernantes ni para los legisladores, no hay manera de que el país pueda salir adelante si no arregla este desequilibrio, porque iría en perjuicio de todas las empresas y del sector productivo.

Recordó que, tal como lo prometió el 2 de septiembre con motivo de su Tercer Informe de Gobierno, está dispuesto a hacer cambios de fondo aunque no sean agradables ni placenteros para nadie.

“Son cambios que cuestan y que cuestan tanto, que si no costaran los hubieran hecho otros presidentes hace 20 o 30 años. No los hicieron, respeto su decisión, su punto de vista, pero nosotros, ustedes y yo, esta generación de mexicanos no tenemos más tiempo que perder”, refirió.

Convocó a los industriales químicos, representados por su presidente José de Jesús García, a proponerle los cambios que necesita este sector para llevarlos a cabo “así tengan costos políticos, impliquen polémica o controversia”.

Recordó que una de esas medidas “delicadas, difíciles y riesgosas” fue la liquidación de Luz y Fuerza y anunció que habrá otros cambios para poder hacer más eficiente, honesta y transparente la administración pública.

Cecilia Téllez Cortés, Crónica, 30 de octubre.