El presidente Felipe Calderón advirtió que de no alcanzarse un compromiso vinculante entre los países para combatir el cambio climático, la próxima oportunidad para lograrlo será en 2010 en México.
Al refrendar su deseo de éxito a la XV Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático (COP15), que se lleva a cabo en la capital danesa, enfatizó no obstante que de no avanzarse en los propósitos trazados, “nos preparamos para que a partir de lo logrado en Copenhague, en México puedan concretarse los anhelos de los países y de la humanidad de tener compromisos claros, estrategias ciertas y eficaces para combatir con éxito el cambio climático”.
En un mensaje a medios, atestiguado por el ganador del Premio Nobel de Química, Mario Molina, el mandatario apuntó que si bien no existe consenso sobre la ciudad en la que se celebraría la XVI Conferencia, se mencionó que podría efectuarse en el Distrito Federal, Monterrey o Cancún, aunque el secretario de Medio Ambiente, Juan Elvira se apresuró a aclarar que Naciones Unidas no establece un plazo preciso para tomar la decisión sobre la ciudad sede, sino que la designa el presidente Felipe Calderón.
En este sentido, el jefe del gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, ya se ha pronunciado para facilitar que esta cumbre se pueda realizar en la capital del país.
FONDO VERDE. A su llegada a Copenhague, Calderón destacó la necesidad de contar con un mecanismo que recoja los elementos centrales de la propuesta que México ha impulsado como el Fondo Verde para combatir el cambio climático.
De cara a su participación en la sesión plenaria, a la que también asisten el venezolano Hugo Chávez y el boliviano Evo Morales, el primer mandatario dijo que México trae a la Conferencia sobre Cambio Climático el compromiso de contribuir a cerrar la brecha entre países en desarrollo y países desarrollados “tal como enfatizaré mañana en la plenaria”.
Calderón, quien al margen de los trabajos de la Cumbre recibirá el Premio Globe al liderazgo internacional de medio ambiente, aclaró que este encuentro internacional no debe ser un debate y una confrontación entre países desarrollados y países en desarrollo, es más bien un desafío entre el hombre y la naturaleza que debemos resolver unos y otros.
México llega con la firme decisión de impulsar un acuerdo ambicioso que define el camino hacia instrumentos que sean vinculantes entre todos los Estados, para que se comprometan a cumplir compromisos concretos para combatir el cambio climático.
Recordó que nuestro país estableció la meta de que para el 2010 reduzca en un 30 por ciento las emisiones contaminantes con relación a la tendencia actual, siempre y cuando se cuente con apoyo financiero y tecnológico internacional.
También hizo alusión a que durante el pasado mes de julio, México fue el primer país en desarrollo que se comprometió unilateralmente, sin condiciones, a reducir en 50 millones de toneladas equivalentes en dióxido de carbono para el 2012.
Informó que la propuesta mexicana de crear un Fondo Verde para combatir el cambio climático ha alcanzado consensos con Dinamarca, Reino Unido, Australia y Noruega.
En la apertura de la XIX Cumbre Iberoamericana, celebrada a fines de noviembre en Estoril, Portugal, el presidente Felipe Calderón dejó entrever su desánimo frente a este encuentro internacional:
“La Cumbre de Copenhague no lleva el grado de comprensión de acuerdos que el mundo necesita y que esperaba desde hace tiempo.
“No será posible construir en Copenhague un acuerdo que pueda sustituir o por lo menos establecer bases que den continuidad al desarrollo del Protocolo de Kioto”, refirió.
Descartan adelantar cumbre del 2010
México y las Naciones Unidas descartaron adelantar la próxima reunión de la Conferencia de las Partes (COP16) sobre cambio climático, como pidió el martes pasado el ex vicepresidente de EU, Al Gore, en Copenhague.
México, organizador de la reunión prevista para diciembre de 2010, no quiere un acuerdo “sobre las rodillas” ni con prisas, explicó Fernando Morales, vocero del secretario de Medioambiente, Juan Elvira Quesada.
Señaló que se desea un acuerdo con avances concretos y reducciones drásticas de gases por parte de los países más contaminantes, “que no se va a lograr en tres o seis meses”.
El portavoz de la ONU, John Hay, explicó que de aquí a la cumbre de México habrá varias reuniones y otro encuentro en Bonn en junio de 2010 en el que se prevé dar un marco legal a lo que se acuerde en Copenhague, por lo que es innecesario convocar otra cita en julio.
Al refrendar su deseo de éxito a la XV Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático (COP15), que se lleva a cabo en la capital danesa, enfatizó no obstante que de no avanzarse en los propósitos trazados, “nos preparamos para que a partir de lo logrado en Copenhague, en México puedan concretarse los anhelos de los países y de la humanidad de tener compromisos claros, estrategias ciertas y eficaces para combatir con éxito el cambio climático”.
En un mensaje a medios, atestiguado por el ganador del Premio Nobel de Química, Mario Molina, el mandatario apuntó que si bien no existe consenso sobre la ciudad en la que se celebraría la XVI Conferencia, se mencionó que podría efectuarse en el Distrito Federal, Monterrey o Cancún, aunque el secretario de Medio Ambiente, Juan Elvira se apresuró a aclarar que Naciones Unidas no establece un plazo preciso para tomar la decisión sobre la ciudad sede, sino que la designa el presidente Felipe Calderón.
En este sentido, el jefe del gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, ya se ha pronunciado para facilitar que esta cumbre se pueda realizar en la capital del país.
FONDO VERDE. A su llegada a Copenhague, Calderón destacó la necesidad de contar con un mecanismo que recoja los elementos centrales de la propuesta que México ha impulsado como el Fondo Verde para combatir el cambio climático.
De cara a su participación en la sesión plenaria, a la que también asisten el venezolano Hugo Chávez y el boliviano Evo Morales, el primer mandatario dijo que México trae a la Conferencia sobre Cambio Climático el compromiso de contribuir a cerrar la brecha entre países en desarrollo y países desarrollados “tal como enfatizaré mañana en la plenaria”.
Calderón, quien al margen de los trabajos de la Cumbre recibirá el Premio Globe al liderazgo internacional de medio ambiente, aclaró que este encuentro internacional no debe ser un debate y una confrontación entre países desarrollados y países en desarrollo, es más bien un desafío entre el hombre y la naturaleza que debemos resolver unos y otros.
México llega con la firme decisión de impulsar un acuerdo ambicioso que define el camino hacia instrumentos que sean vinculantes entre todos los Estados, para que se comprometan a cumplir compromisos concretos para combatir el cambio climático.
Recordó que nuestro país estableció la meta de que para el 2010 reduzca en un 30 por ciento las emisiones contaminantes con relación a la tendencia actual, siempre y cuando se cuente con apoyo financiero y tecnológico internacional.
También hizo alusión a que durante el pasado mes de julio, México fue el primer país en desarrollo que se comprometió unilateralmente, sin condiciones, a reducir en 50 millones de toneladas equivalentes en dióxido de carbono para el 2012.
Informó que la propuesta mexicana de crear un Fondo Verde para combatir el cambio climático ha alcanzado consensos con Dinamarca, Reino Unido, Australia y Noruega.
En la apertura de la XIX Cumbre Iberoamericana, celebrada a fines de noviembre en Estoril, Portugal, el presidente Felipe Calderón dejó entrever su desánimo frente a este encuentro internacional:
“La Cumbre de Copenhague no lleva el grado de comprensión de acuerdos que el mundo necesita y que esperaba desde hace tiempo.
“No será posible construir en Copenhague un acuerdo que pueda sustituir o por lo menos establecer bases que den continuidad al desarrollo del Protocolo de Kioto”, refirió.
Descartan adelantar cumbre del 2010
México y las Naciones Unidas descartaron adelantar la próxima reunión de la Conferencia de las Partes (COP16) sobre cambio climático, como pidió el martes pasado el ex vicepresidente de EU, Al Gore, en Copenhague.
México, organizador de la reunión prevista para diciembre de 2010, no quiere un acuerdo “sobre las rodillas” ni con prisas, explicó Fernando Morales, vocero del secretario de Medioambiente, Juan Elvira Quesada.
Señaló que se desea un acuerdo con avances concretos y reducciones drásticas de gases por parte de los países más contaminantes, “que no se va a lograr en tres o seis meses”.
El portavoz de la ONU, John Hay, explicó que de aquí a la cumbre de México habrá varias reuniones y otro encuentro en Bonn en junio de 2010 en el que se prevé dar un marco legal a lo que se acuerde en Copenhague, por lo que es innecesario convocar otra cita en julio.
Agencias en Copenhague, Crónica, 17 de diciembre.
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