Con poco optimismo ante las versiones que ubican en mil millones de pesos el posible recorte a la propuesta presupuestal del Instituto Federal Electoral (IFE), los nueve consejeros acudirán hoy a la Cámara de Diputados en aras de convencer a los legisladores de la necesidad de que aprueben esa partida.
El IFE solicitó 9 mil 200 millones de pesos, de los cuales 3 mil millones corresponden a las prerrogativas de los partidos.
Será el primer encuentro formal, a pesar de que en días pasados hubo contactos entre consejeros y diputados.
Como en años recientes, la Cámara de Diputados estudia un recorte a la partida solicitada por el IFE, aunque ha dejado intactas las prerrogativas partidistas.
El consejero Marco Antonio Baños afirmó que un recorte al IFE pondría en serio riesgo los programas prioritarios; especialmente la actualización del padrón electoral con miras al proceso de 2012.
Si se decide un recorte drástico al presupuesto del instituto, impactaría al Registro Federal de Electores (RFE), al cual se asignaron 2 mil 500 millones de pesos; se “haría inmanejable este instrumento para los comicios federales de 2012 y se afectaría el ciclo de tres años de actualización”.
“Si se toma en cuenta que de los 9 mil millones de pesos, 3 mil millones son para los partidos y 2 mil 500 millones para el RFE, para la operación de los otros órganos del IFE sólo se tendrían 3 mil 700 millones; el recorte crearía una situación muy complicada”, dijo Baños.
El IFE solicitó 9 mil 200 millones de pesos, de los cuales 3 mil millones corresponden a las prerrogativas de los partidos.
Será el primer encuentro formal, a pesar de que en días pasados hubo contactos entre consejeros y diputados.
Como en años recientes, la Cámara de Diputados estudia un recorte a la partida solicitada por el IFE, aunque ha dejado intactas las prerrogativas partidistas.
El consejero Marco Antonio Baños afirmó que un recorte al IFE pondría en serio riesgo los programas prioritarios; especialmente la actualización del padrón electoral con miras al proceso de 2012.
Si se decide un recorte drástico al presupuesto del instituto, impactaría al Registro Federal de Electores (RFE), al cual se asignaron 2 mil 500 millones de pesos; se “haría inmanejable este instrumento para los comicios federales de 2012 y se afectaría el ciclo de tres años de actualización”.
“Si se toma en cuenta que de los 9 mil millones de pesos, 3 mil millones son para los partidos y 2 mil 500 millones para el RFE, para la operación de los otros órganos del IFE sólo se tendrían 3 mil 700 millones; el recorte crearía una situación muy complicada”, dijo Baños.
Alonso Urrutia, La Jornada, 28 de octubre.
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