Culpan a Chávez por sanciones

MIAMI Agencias).— Una coalición de partidos opositores venezolanos en Miami acusó el jueves al presidente Hugo Chávez de ser el único responsable de las sanciones impuestas el martes por Estados Unidos a la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), por apoyar el sector energético de Irán.

Al mismo tiempo, desde Caracas, el ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro, dijo que suspender los envíos de petróleo a EU, en respuesta a las sanciones aplicadas sería una medida extrema.

La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de Miami también afirmó que el mandatario venezolano “manipula y politiza” las sanciones del Departamento de Estado para recuperar su “deteriorada imagen de gobernante” con miras a las elecciones presidenciales de 2012.

“El único responsable de estas sanciones a PDVSA es Hugo Chávez, por actuar a conciencia dentro de una estrategia previamente elaborada para crear, después de conocida las sanciones, una matriz de opinión ‘nacionalista’ y defensora de su proyecto expansionista ‘revolucionario’”, señaló la MUD en un comunicado.

Con la presunta estrategia, precisó, ataca a la oposición y busca ocultar “los graves problemas sociales y económicos que viven los venezolanos”. La MUD aseveró que la “desastrosa política internacional” del gobierno de Chávez, que incentiva el odio y usa el petróleo como arma política para “doblegar” a sus adversarios, “es la consecuencia directa de esta enojosa y condenable situación”.

El gobierno de Estados Unidos sancionó a PDVSA y a otras seis empresas internacionales que apoyan al sector energético de Irán. Las sanciones incluyen no poder firmar contratos con Estados Unidos, ni recibir financiación de ese país para sus operaciones de importación y exportación.

“En todo el planeta”

Nicolás Maduro puntualizó que cortar el suministro de crudo a Estados Unidos “es una decisión realmente que se corresponde con momentos extremos, que en su momento se podría evaluar”.

“Lo que sí es de absoluta seguridad es que nuestro petróleo se puede vender en todo el planeta”, agregó el ministro del Exterior a la televisión venezolana.

Venezuela envía a Estados Unidos alrededor de 1.2 millones de barriles diarios, la mayoría a tres refinerías y el combustible procesado es distribuido en unos 6 mil estaciones de surtido. El gobierno del presidente Chávez ha reaccionado con mucho ruido a las sanciones, pero no ha tomado ninguna represalia ante un país con el cual sus relaciones están a nivel de encargados de negocio.

Maduro reiteró el rechazo a las sanciones, recalcando que Venezuela es un país libre, con vínculos comerciales y energéticos con distintas naciones que le permiten mantener una independencia respecto de la industria petrolera estadounidense.

“Todavía estamos en fase de evaluación para ver cómo (las sanciones) afectarían el mercado estadounidense. Lo que sí puedo decir es que tenemos capacidad para afrontar y superar este tipo de sanciones que intentan golpearnos”, aseveró.

Los trabajadores petroleros salieron ayer de nueva cuenta a las calles a protestar contra la medida. Portando con camisetas rojas, se concentraron ante el edificio principal de PDVSA en Caracas.

El ministro de Energía y Petróleo y presidente de PDVSA, Rafael Ramírez, dijo que las sanciones representan una acción “imperialista” del gobierno de Estados Unidos.

El Universal, 27 de junio.