“Será una elección sin equidad y en la zozobra”

Alejandro Encinas es candidato a la gubernatura del Estado de México por la coalición Unidos Podemos Más. En entrevista habla de la contienda electoral más importante del país por entidad.

¿Por qué comenzó su campaña en Ecatepec?

Porque allí, en 1978 en trabajos de organización sindical, inició mi carrera política. Estábamos trabajando en la zona fabril de Ecatepec, apoyando a los trabajadores en la organización de los sindicatos. Y vamos a demostrar que nadie tiene las escrituras de ese municipio.

¿Cómo ve el proceso electoral?

En primer lugar, dos componentes fundamentales en el proceso: todo el diseño de un proceso electoral donde se ha restringido toda posibilidad de una competencia equitativa y democrática. Donde, desde el gobierno del estado y la utilización de recursos públicos hasta la reforma electoral, va inducida a desalentar la participación y la competitividad en la contienda. En segundo lugar, un escenario de un enorme conflicto en el estado, no solamente por el incremento en la desigualdad y la pobreza, sino por la falta de esperanza, de certidumbre en la gente. Hay un estado de ánimo social de frustración y de zozobra, que indudablemente puede convertirse en un foco rojo y en una situación de ingobernabilidad. Son los dos componentes que van a jugar, en lo fundamental, en este proceso.

¿Cuál es el efecto de no lograr concretar una alianza entre el PAN y el PRD?

Sin lugar a dudas, habrá algunos ciudadanos que mantendrán su convicción respecto a lo importante de esa alianza, pero creo que no va a pesar en el resultado final, creo que habrá una recomposición en el electorado en esta pequeña campaña de 45 días.

¿Qué figuras lo acompañarán?

Van a estar acompañándome los principales líderes de mi partido y de la izquierda y sin lugar a dudas van a ser un gran aporte a nuestro proyecto. He platicado con todos, desde nuestro fundador, el ingeniero Cárdenas, al que le tengo un gran respeto; Andrés Manuel, somos parte de un proyecto; con Marcelo, con quien he trabajado muchos años. Con la dirección nacional, tanto Jesús Zambrano como Dolores Padierna. Estaremos invitando a ex gobernadores, Amalia ya estuvo con nosotros en Toluca y vendrán los gobernadores de mi partido en otras entidades.

¿En qué sentido viene este apoyo?

Fundamentalmente su apoyo político, que es lo importante. Su presencia, que sin lugar a dudas da una señal de unidad y de cohesión y es lo que queremos trasmitir.

¿Qué es lo que más le preocupa?

La inequidad, la enorme desigualdad que hay en la contienda. La utilización de recursos públicos. El querer comprar y no ganar la elección con dineros, manipulando la precariedad y la necesidad de la gente. Esa realmente es la preocupación. Aquí va a haber un ensayo de lo que el PRI quiere hacer en la elección Presidencial de 2012. Vamos a ver, indudablemente, muchas de las prácticas que deberíamos de erradicar de los procesos electorales en el país.

¿No se adelantó en el Estado de México el proceso presidencial?

Indudablemente juega y pesa en la elección presidencial. Aunque tradicionalmente se dice que las elecciones en el Estado de México son el laboratorio político electoral de elección presidencial, no necesariamente se corresponden los resultados. Te pongo dos ejemplos: en 1999 Montiel ganó la elección en el estado y en 2000 la ganó Vicente Fox. En 2005 la ganó Enrique Peña Nieto y en 2006 arrasó Andrés Manuel López Obrador. Claro que hay un ingrediente, un componente nuevo, que es la aspiración presidencial del gobernador, que no dista mucho de la de Arturo Montiel. Son las mismas formas y muchas de las mismas prácticas con las que se han querido posicionar, pero independientemente del resultado de la elección en el estado, siempre la presidencial tiene ingredientes muy particulares.

¿Cómo jugarán en esta elección el gobierno federal, el del Distrito Federal y el del Estado de México?

Bueno, creo que el gobierno federal debe actúar con responsabilidad y no canalice los programas y recursos sociales al PAN, como lo está haciendo el PRI a favor de su candidato. Y en el caso del gobierno del Distrito Federal, lo digo con toda claridad, su apoyo y su respaldo será de solidaridad. Yo en lo personal lo he dicho, quiero que mi campaña se finque con recursos públicos, que significan las prerrogativas y sólo aportaciones de nuestros militantes y simpatizantes.

¿Por qué decidió ser candidato?

Por muchas razones. La primera motivación fue, en primer lugar, evitar una división de mi partido y de las izquierdas, evitar que fuéramos con dos candidatos de la izquierda en el Estado de México, lo cual iniciaba un camino sin regreso para ir con dos candidatos y con la izquierda dividida en 2012. En este ánimo de ser un factor de unidad, de cohesionar una fuerza lo suficientemente competitiva, para volver a ser mayoría en la entidad, como ya lo hemos sido en tres ocasiones.

¿Qué ha escuchado de la gente?

El reclamo que nos hacía la gente en la calle era: “ya pónganse de acuerdo”, “ya dejen de estar peleándose entre ustedes”, “ustedes no son el enemigo a vencer”. Ya hay una respuesta a ese reclamo ciudadano. Pero también hay una cohesión, particularmente en el PRD, que indudablemente va a fortalecer, con una visión de largo plazo, el proyecto que representamos y va a favorecer una coalición con las izquierdas y las fuerzas progresistas en esta elección y en la federal de 2012 y en un proyecto de largo aliento.

¿Qué queda del Estado de México que conoció cuando compitió por la gubernatura en 1993?

Creo que lo que queda por resolver es la hegemonía del PRI en la gubernatura. Ya hemos ganado en prácticamente todos los municipios y en todos los distritos electorales, falta acabar con la hegemonía que detenta el PRI desde hace 82 años en el gobierno del estado.

Pero en estos 18 años ha habido avances, retrocesos…

Al contrario. Hay retrocesos muy significativos. Puedo poner muchos ejemplos que no tienen que ver solamente con desarrollo urbano desordenado, con la marginación, sino como muchas zonas han ido perdiendo su posibilidad de desarrollo.

Y en materia política y electoral ¿qué diferencias encuentra ahora?

Son diferencias sustantivas. Para empezar el gobernador no es del mismo partido que está en la Presidencia. En 1993 enfrentamos al gobierno federal y al gobierno del estado que buscaban el aniquilamiento del PRD, particularmente del gobierno de Salinas de Gortari, que estaba en su clímax. En segundo lugar, no teníamos la capacidad competitiva que tenemos ahora. Hay que recordar que, después de la campaña que hicimos en el 93, el primer repunte de competencia electoral que lleva a la izquierda a ser una fuerza nacional no es el triunfo de Cuauhtémoc en el 97 en la Ciudad de México, es el triunfo en 96 en Netzahualcóyotl, en Texcoco y en otros municipios del estado, lo que nos vuelve una fuerza nacional competitiva.

Luis Contreras, Milenio, 28 de mayo.