La Paz, BCS, 27 de enero. La intención del voto en favor del candidato del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura, Marcos Covarrubias Villaseñor, “se desplomó”; por ello, los panistas deben ejercer “el voto útil” en favor del perredista Luis Armando Díaz a fin de impedir el regreso del Revolucionario Institucional (PRI), que representa “un pasado de saqueo y corrupción”, dijeron integrantes de la Comisión Política Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Previamente, en la ciudad de México Gustavo Madero, dirigente nacional del PAN, rechazó la versión de que “en reciprocidad” con lo hecho en Guerrero (donde el candidato del PAN declinó en favor del abanderado perredista Ángel Aguirre Rivero) el PRD haya ofrecido al blanquiazul la defección de su candidato a la gubernatura en Baja California Sur.
Covarrubias Villaseñor, manifestó Madero, “cuenta con una amplia ventaja, de dos a uno, sobre los demás contendientes, de tal forma que el 6 de febrero su victoria será contundente” y con ello el PRI se estrenará este año con “dos megaderrotas: en Guerrero y en Baja California Sur”, advirtió.
Horas antes, Enrique Romero Aquino, comisionado de Derechos Humanos del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD, advirtió que entre la clase política de Baja California Sur circula la versión (de la declinación del candidato perredista), pero advirtió que las condiciones políticas aquí no son las mismas que en Guerrero. “Las posibilidades que tenemos de ganar son reales, y se tiene más estructura que el PRI, y sobre todo, que el PAN”.
José Antonio Rueda, enviado del CEN del PRD, dijo a su vez que si el candidato del blanquiazul a la gubernatura contesta con “bravatas, allá él”, pero el llamado a sumarse a la campaña del abanderado del PRD, Luis Armando Díaz, se hace a los panistas en general para cerrar el paso a “la oposición más peligrosa: el PRI”.
La elección en Baja California Sur es “atípica” porque las preferencias se dividen en tres, pero a unos días de la jornada electoral el PRD representa “el tercio mayor”, dijo. Puntualizó que mientras el PAN se debilitó, el PRI se ha mantenido con base en dinero, y es necesario que explique el origen de esos recursos.
“El PRI no tiene ninguna posibilidad de regresar en Baja California Sur, pero si lo hace da miedo que tenga vínculos con quienes han ensangrentado el país en muchos estados”, expresó.
Humberto Moreira Valdés, dirigente nacional electo del PRI, sostuvo que en Baja California Sur se mantendrá la posición de competencia, sin alianzas de última hora (entre PAN y PRD).
Confió en que el candidato del PRI, Ricardo Barroso Agramont, ganará las elecciones del 6 de febrero porque durante el transcurso de la campaña ha pasado del tercer lugar al primero, y en el sprint final conseguirá una ventaja “relevante”.
Previamente, en la ciudad de México Gustavo Madero, dirigente nacional del PAN, rechazó la versión de que “en reciprocidad” con lo hecho en Guerrero (donde el candidato del PAN declinó en favor del abanderado perredista Ángel Aguirre Rivero) el PRD haya ofrecido al blanquiazul la defección de su candidato a la gubernatura en Baja California Sur.
Covarrubias Villaseñor, manifestó Madero, “cuenta con una amplia ventaja, de dos a uno, sobre los demás contendientes, de tal forma que el 6 de febrero su victoria será contundente” y con ello el PRI se estrenará este año con “dos megaderrotas: en Guerrero y en Baja California Sur”, advirtió.
Horas antes, Enrique Romero Aquino, comisionado de Derechos Humanos del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD, advirtió que entre la clase política de Baja California Sur circula la versión (de la declinación del candidato perredista), pero advirtió que las condiciones políticas aquí no son las mismas que en Guerrero. “Las posibilidades que tenemos de ganar son reales, y se tiene más estructura que el PRI, y sobre todo, que el PAN”.
José Antonio Rueda, enviado del CEN del PRD, dijo a su vez que si el candidato del blanquiazul a la gubernatura contesta con “bravatas, allá él”, pero el llamado a sumarse a la campaña del abanderado del PRD, Luis Armando Díaz, se hace a los panistas en general para cerrar el paso a “la oposición más peligrosa: el PRI”.
La elección en Baja California Sur es “atípica” porque las preferencias se dividen en tres, pero a unos días de la jornada electoral el PRD representa “el tercio mayor”, dijo. Puntualizó que mientras el PAN se debilitó, el PRI se ha mantenido con base en dinero, y es necesario que explique el origen de esos recursos.
“El PRI no tiene ninguna posibilidad de regresar en Baja California Sur, pero si lo hace da miedo que tenga vínculos con quienes han ensangrentado el país en muchos estados”, expresó.
Humberto Moreira Valdés, dirigente nacional electo del PRI, sostuvo que en Baja California Sur se mantendrá la posición de competencia, sin alianzas de última hora (entre PAN y PRD).
Confió en que el candidato del PRI, Ricardo Barroso Agramont, ganará las elecciones del 6 de febrero porque durante el transcurso de la campaña ha pasado del tercer lugar al primero, y en el sprint final conseguirá una ventaja “relevante”.
Raymundo León y Alma Muñoz, La Jornada, 28 de enero.
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