Contrasta seguridad de aspirantes

Los protocolos de seguridad que implementan los equipos de campaña de los candidatos a la gubernatura del Estado de México contrastan por su grado de sofisticación y envergadura.

El abanderado de la coalición “Unidos por ti”, Eruviel Ávila, por ejemplo, es custodiado por elementos de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE) que en algún momento protegieron al gobernador Enrique Peña Nieto.

Funcionarios de la ASE reconocieron que policías estatales acuden a los mítines del priísta ataviados de playeras rojas del PRI. “Se tienen que camuflar para garantizar la seguridad”, dijeron.

El comisionado de la ASE, David Garay Maldonado, explicó días previos al inicio de las campañas que el protocolo de seguridad impide revelar detalles.

“El contenido del protocolo mismo está como información confidencial por la Ley de Transparencia de Acceso a la Información Pública”, aclaró. Por esta razón no se puede revelar el número de elementos que participan.

Luis Felipe Bravo Mena, del PAN, dijo que su seguridad es financiada por el gobierno estatal. Reveló que rechazó que su resguardo estuviera a cargo de la ASE, pero sí aceptó la seguridad privada que ofrece la empresa “Control”.

A los mítines, Bravo Mena llega a bordo de una Suburban dorada, escoltada por una camioneta Yukon obscura y un auto compacto gris. El sábado pasado estrenó el “BravoBús”, un autobús acondicionado para sus labores y que es extensión de su casa de campaña.

Alejandro Encinas, de la coalición “Unidos podemos más”, reiteró su postura de no contar con protección del gobierno, ni de seguridad privada, para evitar gastos innecesarios.

El resguardo del perredista corre a cargo de su hermano Gilberto, así como de su chofer particular y personal de logística de la campaña. Viaja sin camioneta de escoltas y mantiene un contacto estrecho con los ciudadanos.


Emilio Fernández corresponsal, EL Universal, 25 de mayo.

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