El ciclo del PRD en el DF llegó a su fin, dice Miranda de Wallace

La virtual candidata del PAN a la Jefatura del Gobierno capitalino, Isabel Miranda de Wallace, desde Nueva York se congratuló ayer de que el abanderado de las izquierdas al mismo cargo, Miguel Ángel Mancera, se sume a las iniciativas para blindar el próximo proceso electoral en la ciudad de México, que va en el mismo sentido que ella presentó el pasado 20 de enero.

Por ello, dijo estar dispuesta a formalizar cualquier acuerdo, “donde quieran y cuando quieran mis contrapartes políticos, siempre y cuando se refleje en beneficio de los ciudadanos”, comentó la luchadora social.

Recordó que el mes pasado lanzó una iniciativa para firmar un pacto de civilidad entre los contendientes, basado en cuatro puntos: 1.—Durante las campañas, respeto al oponente y que no haya descalificaciones mutuas. 2.—Respeto a la vida íntima de los contendientes y sus familias. 3.—Si alguien critica una propuesta de algún candidato, que haga una propuesta y no nada más critique. 4.—Invitar a los contendientes a que se comprometan a incluir en su agenda de trabajo las propuestas de organizaciones civiles.

Por otra parte, durante su reunión con estudiantes mexicanos y líderes comunitarios en la Universidad de Yale, Miranda de Wallace aseguró que el ciclo del PRD en el DF “ha llegado a su fin” y confía en que ella será la persona que así lo demuestre en las elecciones del 1 de julio próximo.

Reiteró que su bandera para la campaña que iniciará a finales de abril será la de llevar a los ciudadanos al poder, con la promesa de combatir la corrupción, reducir el desempleo y mejorar la seguridad.

Aseguró que el 51 por ciento de los capitalinos “ya no queremos ser gobernados por el PRD”, pues destacó que el PRD tuvo un ciclo de vida “y ya está agotado”, sentenció.

Además, criticó la gestión de Marcelo Ebrard, al afirmar que aumentó la pobreza, disminuyó el empleo y empeoró la corrupción. “Estos dos últimos son los principales problemas de la ciudad”, afirmó.


Héctor Cruz López, La Crónica, 29 de febrero.