La tensión entre Colombia y Venezuela se agrava

CARACAS (Agencias).— El gobierno venezolano volvió a protestar ayer ante el de Colombia, ahora por supuesto “espionaje”, en medio de la repatriación de los cadáveres de ocho colombianos víctimas de un asesinato múltiple.
En una nota de la Cancillería, el gobierno de Venezuela expresó a Colombia su “más enérgica protesta” por las supuestas actividades de “espionaje” de funcionarios colombianos y exigió el “cese inmediato” de esas actividades que calificó de “claramente inamistosas”. La nota denuncia “la reiterada presencia de funcionarios del Departamento Administrativo de Seguridad colombiano (DAS) en territorio venezolano, detectados realizando labores de espionaje e intentos de soborno”.

Entretanto, Venezuela tenía previsto ayer por la tarde repatriar los cuerpos de ocho colombianos, que junto a otros cuatro miembros de un equipo aficionado de futbol, entre ellos un peruano y un venezolano, fueron secuestrados el 11 de octubre en la localidad fronteriza venezolana de Fernández Feo. Sus cuerpos sin vida fueron hallados el sábado.

Uno de los plagiados sobrevivió: un colombiano que se encuentra recluido en una clínica venezolana bajo fuertes medidas de seguridad.

De acuerdo con la edición electrónica del diario colombiano El Tiempo, el sobreviviente se llama Manuel Júnior Cortes y recibió ayuda de un campesino tras caminar tres horas herido por un proyectil, mientras sus compañeros fallecieron por el impacto de varios disparos, según habría declarado a las autoridades venezolanas. Cortes indicó que los cautivos, que eran doce, estuvieron encadenados al cuello, eran mantenidos en la cima de una montaña custodiados por unos 18 hombres fuertemente armados y encapuchados.

Agregó que el viernes pasado, sus captores les informaron que los dejarían en libertad, por lo que procedieron a quemar el campamento en donde estuvieron y los obligaron a subir en dos camionetas.

“Cuando pararon nos hicieron bajar, arrodillados en el piso y golpeándonos sentimos la ráfaga de seis o siete disparos, de los cuales me pegaron uno solo”, detalló Cortés. Añadió que tras las ráfagas se quedó quieto: “Abrí los ojos y estaba vivo. Toqué a los demás amigos pero estaban muertos”.

El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, hizo un llamado a su par venezolano, Hugo Chávez, para coordinar las actividades y proteger la vida de los habitantes en la frontera.

El ministro de Defensa de Colombia, Gabriel Silva, inició ayer una visita a EU y fue recibido por el jefe del Pentágono, Robert Gates. La visita de Silva coincide con el anuncio de Bogotá de que no someterá al Congreso el acuerdo con EU para el uso de bases militares.
Agencias en Caracas, El Universal, 27 de octubre.

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