El embajador de Cuba en México, Manuel Aguilera de la Paz, aseguró que los nexos entre ambos países están normalizados. “Hay voluntad de ambos gobiernos para continuar avanzando en las relaciones diplomáticas bajo un respeto mutuo”, resaltó.
En conferencia de prensa, informó que hoy el gobierno cubano presentará a consideración de la Asamblea General de Naciones Unidas el proyecto de resolución Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba, en el cual se reafirma que el asedio ha causado un daño económico al pueblo cubano estimado en 236 mil 221 millones de dólares a precios actuales de dicha moneda.
Comentó que el presidente Raúl Castro está dispuesto a reunirse con su homólogo mexicano, Felipe Calderón, en cuanto la Secretaría de Relaciones Exteriores entregue la propuesta de fecha de visita. “Hay voluntad de seguir desarrollando la relación con México dentro del respeto mutuo y de la no injerencia.”
Agregó que el acuerdo migratorio firmado el año pasado ha dado buenos resultados, pues ha disminuido el número de cubanos indocumentados que ingresan a México para llegar a Estados Unidos. Se mantiene el intercambio de información en la materia y la repatriación de los que ingresaron sin papeles.
Lo que sigue preocupando a las autoridades de Cuba son las violaciones a los derechos humanos de los indocumentados por mafias de origen cubano radicadas en Miami, que actúan en contubernio con grupos mexicanos para promover la salida de cubanos a Estados Unidos y por lo cual cada ciudadano de la isla paga de 10 a 15 mil dólares. “Es un fenómeno delictivo que afecta la integridad y los derechos humanos de los cubanos, porque se ponen en manos de mafias.”
A pregunta expresa en torno al libro Fidel y Raúl, mis hermanos, en el cual se revela que Juanita, la quinta de los siete hermanos Castro, colaboró con la CIA, el embajador cubano asentó: “no tengo ninguna opinión. No conozco el libro ni me interesa conocerlo. La postura de Juanita Castro es bien conocida, no hay nada novedoso”.
Respecto de la actuación de Estados Unidos con Cuba, el diplomático asentó que hay medidas que constituyen pasos positivos pero son insuficientes y limitadas, como la autorización a empresas estadunidenses de efectuar determinadas operaciones de telecomunicaciones con la isla. Sin embargo, dijo, el presidente Barack Obama no ha eliminado el complejo entramado de leyes y disposiciones administrativas que conforman las bases legales de la política del bloqueo y que están dirigidas a destruir la economía cubana. No existen razones para pensar que la actual administración tiene voluntad de flexibilizarlo, resaltó.
En conferencia de prensa, informó que hoy el gobierno cubano presentará a consideración de la Asamblea General de Naciones Unidas el proyecto de resolución Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba, en el cual se reafirma que el asedio ha causado un daño económico al pueblo cubano estimado en 236 mil 221 millones de dólares a precios actuales de dicha moneda.
Comentó que el presidente Raúl Castro está dispuesto a reunirse con su homólogo mexicano, Felipe Calderón, en cuanto la Secretaría de Relaciones Exteriores entregue la propuesta de fecha de visita. “Hay voluntad de seguir desarrollando la relación con México dentro del respeto mutuo y de la no injerencia.”
Agregó que el acuerdo migratorio firmado el año pasado ha dado buenos resultados, pues ha disminuido el número de cubanos indocumentados que ingresan a México para llegar a Estados Unidos. Se mantiene el intercambio de información en la materia y la repatriación de los que ingresaron sin papeles.
Lo que sigue preocupando a las autoridades de Cuba son las violaciones a los derechos humanos de los indocumentados por mafias de origen cubano radicadas en Miami, que actúan en contubernio con grupos mexicanos para promover la salida de cubanos a Estados Unidos y por lo cual cada ciudadano de la isla paga de 10 a 15 mil dólares. “Es un fenómeno delictivo que afecta la integridad y los derechos humanos de los cubanos, porque se ponen en manos de mafias.”
A pregunta expresa en torno al libro Fidel y Raúl, mis hermanos, en el cual se revela que Juanita, la quinta de los siete hermanos Castro, colaboró con la CIA, el embajador cubano asentó: “no tengo ninguna opinión. No conozco el libro ni me interesa conocerlo. La postura de Juanita Castro es bien conocida, no hay nada novedoso”.
Respecto de la actuación de Estados Unidos con Cuba, el diplomático asentó que hay medidas que constituyen pasos positivos pero son insuficientes y limitadas, como la autorización a empresas estadunidenses de efectuar determinadas operaciones de telecomunicaciones con la isla. Sin embargo, dijo, el presidente Barack Obama no ha eliminado el complejo entramado de leyes y disposiciones administrativas que conforman las bases legales de la política del bloqueo y que están dirigidas a destruir la economía cubana. No existen razones para pensar que la actual administración tiene voluntad de flexibilizarlo, resaltó.
Matilde Pérez, La Jornada, 28 de octubre.
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