'Me queda claro: el candidato manda'

CUERNAVACA.- A cuatro días de haber sido nombrado presidente estatal del PRI, y con un discurso renovado de unidad, lejos de las críticas que hace una semana lanzó en contra de la dirigencia nacional de su partido, por la imposición de candidatos en Morelos, Manuel Martínez Garrigós dice que aquí "el candidato manda".

En entrevista con REFORMA, el Alcalde con licencia de Cuernavaca señala que, luego de reunirse con el candidato del PRI a la Presidencia de la República, Enrique Peña Nieto, aceptó la dirigencia estatal porque era una de las posiciones políticas que le faltaba ocupar en el tricolor.

Y aunque gestionó y presionó para conseguir la candidatura a Gobernador o senador por el PRI, Manuel Martínez afirma ser una persona institucional.

 
¿Te reuniste con Enrique Peña Nieto?

Sí, platicamos con él. Él nos hizo una invitación a que pudiéramos, pues, atender el Partido. Yo soy una gente institucional, a mí me queda claro que el candidato manda, a mí me queda claro, por mi propia formación, que lo más importante ahorita es que Peña Nieto sea el Presidente de la República y, bueno, acordamos por él y por el partido estar trabajando a favor de Amado Orihuela y a favor del partido en Morelos.

 
¿Qué acuerdos se alcanzaron concretamente? ¿Él te ofrece la presidencia del partido en Morelos, o tú le dices que hay unidad si te da la presidencia?

La realidad es que con él, porque eso nunca se hace, se habló de los compromisos en concreto; yo platiqué con el Presidente del Comité Ejecutivo Nacional, lo hice con el secretario de Organización, con Pedro Joaquín Coldwell ,y con el licenciado (Miguel Ángel) Osorio Chong, fuimos encontrando coincidencias.

Dice que la dirigencia estatal del PRI la aceptó porque también era necesario demostrar unidad en el partido, dar un mensaje de cohesión y fortaleza para ganar en las elecciones constitucionales.

Desde su nueva posición, Martínez Garrigós asegura que pondrá todo su empeño en que su otrora contrincante priista, el diputado local con licencia, Amado Orihuela, gane la Gubernatura de Morelos.

Además, afirma no tener problema alguno con el diputado federal con licencia, Francisco Moreno Merino, de quien hace una semana dijo que su imposición como precandidato a senador, por parte del CEN priista, ponía al borde del colapso al PRI en la entidad.

 
¿Has hablado en confianza, en corto, con Amado Orihuela?

Claro, hablamos en muchas ocasiones para poder conciliar, para poder llegar a un entendimiento y, bueno, lo que hemos quedado es respetar nuestros espacios.

Yo soy una gente institucional, me queda claro que él es el candidato, que hay que apoyarlo con todo para poder ganar la contienda electoral, y ahorita mis dos prioridades son llevar a la Presidencia de la República a Enrique Peña Nieto, y al Gobierno del estado a Amado Orihuela.

 
¿Y con Francisco Moreno?

No tengo ya ningún problema con él, yo soy gente institucional, he hecho política toda mi vida, llevo 15 años trabajando en ella, soy un político profesional, a veces se gana, a veces se pierde, yo siempre he dicho que los libros hay que leerlos para adelante, no hay que estar regresando y, bueno, yo ya cerré la etapa donde no logramos nosotros la candidatura.

Si hubo algún conflicto, si hubo algún compromiso que no se cumplió, yo sé que esto así es, y bueno, voy con todo como lo he dicho, a ganar la Presidencia y el Gobierno del estado.

 
¿Qué opinas de las indagatorias abiertas contra los ex Mandatarios de Tamaulipas Manuel Cavazos, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández?

El fortalecimiento democrático pasa por el respeto a las instituciones, y si empezamos a judicializar la política pues no le va a ir bien a la democracia y no le va a ir bien al Estado de derecho, no le va a air bien al Estado Mexicano en todos sus niveles de Gobierno, y en todos sus espacios, luego entonces, yo apelaría por el respeto a las instituciones y porque dejemos de utilizar a la procuración de justicia, a la administración de justicia, como un instrumento político.


Héctor Raúl González corresponsal, Reforma, 5 de febrero.