Se unen tribus... pero levan 'armas'

Las corrientes del PRD apoyaron ayer, sin cortapisas, a Miguel Ángel Mancera como su candidato a la Jefatura de Gobierno.

Sin embargo, pospusieron su Consejo Electivo para definir las jefaturas delegacionales, pleito en el que llevan varias semanas.

Quien busca seguir los pasos de Cuauhtémoc Cárdenas, Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard, quedó flanqueado por todas las corrientes de pensamiento al interior del partido.

Para el acto se dispuso un salón de fiestas en la Zona Rosa, sillas con cubiertas blancas y holanes, música lounge, café, fresco y galletas.

Antagónicos y afines ovacionaron por igual al candidato. En la fotografía del triunfo interno, los brazos de Mancera quedaron levantados por dos dirigentes de la corriente Izquierda Democrática Nacional, que comanda René Bejarano: la Secretaria del PRD nacional, Dolores Padierna, y el líder del partido en el DF, Manuel Oropeza.

En primera fila, el llamado "dream team" de la campaña capitalina, otrora competidores por la candidatura: Joel Ortega, Martí Batres, Carlos Navarrete, Gerardo Fernández Noroña, Laura Velázquez y Alejandro Rojas.

Detrás de ellos, los 254 consejeros del PRD local, quienes en Consejo Electivo avalaron al ex Procurador del DF como propuesta única, luego de que las encuestas hizo que sus competidores renunciar a su aspiración, incluida la presidenta de la Asamblea Legislativa, Alejandra Barrales.

Mancera presumió que con su campaña quiere ayudar al proyecto de López Obrador para que la izquierda gane la Presidencia de la República el 1 de julio.

Quienes saben de operación electoral, como el ahora coordinador de la campaña capitalina, Joel Ortega, entienden ese compromiso representa remontar los 2.2 millones de votos que llevaron a Ebrard al GDF en 2006.

Pero el oropel en el salón de fiestas tuvo su contraste en las calles. En el Ángel de la Independencia, decenas de perredistas, aspirantes a diversos cargos de elección popular, exigían la aplicación de encuestas para designar abanderados.

Sin contar que al mismo tiempo, antes de recibir su constancia como candidato, Mancera se reunió con Barrales, quien se ha negado a reconocer su derrota.

Lograron la reconciliación política. El equipo de la legisladora se sumará a la campaña, incluso se definió que Guillermo Orozco será el enlace. El proyecto que Barrales trabajó con la UNAM será parte de la plataforma.

En una tercer pista, las llamadas "tribus" perredistas se alistaban para intensificar la batalla por las candidaturas a jefes delegacionales, diputados y senadores por el DF.

Para evitar la ruptura y que Mancera se llevara limpia su constancia, el Consejo Estatal electivo del PRD marcó un receso hasta el martes para tratar de destrabar los conflictos de las contiendas locales.

Los perredistas no niegan el conflicto, aunque algunos, como Gilberto Ensástiga, aseguran que más del 80 por ciento de las posiciones para candidaturas están resueltas, que lo importante es destrabar las posiciones a diputados federales por el DF y Senado.

En el salón de fiestas se vio llegar a los tres contendientes por Iztapalapa, la demarcación más conflictiva y preocupante para el partido: Jesús Valencia, Martí Batres y Aleida Alavez. Los dos primeros se saludaron y Batres pidió su número telefónico a Valencia.

 
 
 
Qué se juega
 
El Consejo Electivo del PRD fue aplazado para el martes, debido a falta de acuerdos para:
 
· Las 16 candidaturas a jefes delegacionales.

· Las 40 candidaturas a diputados, una por distrito para la ALDF.

· Las 27 candidaturas a diputados federales, una por distrito para la Cámara de Diputados.

· Las 2 candidaturas al Senado, fórmula por mayoría para el DF.

· Además de listas de representación proporcional a la Asamblea Legislativa, Cámara de Diputados y Senadores.

· Las delegaciones con mayor conflicto son Iztapalapa, Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero.

 Manuel Durán, Reforma, 12 de febrero.