El PAN, en coalición con el Partido Nueva Alianza (Panal), encabeza las preferencias en las elecciones para gobernador de San Luis Potosí con 48%, seguido por el PRI (45%), que postuló candidatura común con el PSD y PVEM. En tercer lugar está el candidato del PRD, PT, Convergencia y PCP con 7%.
Lo anterior se observa en la encuesta realizada por EL UNIVERSAL en viviendas del estado. Aunque la contienda se ha cerrado, si se comparan los resultados con el ejercicio de abril, la intención de voto no refleja cambios significativos.
Con los datos actuales, incluso se puede hablar de un empate técnico, dado que la diferencia entre PRI y PAN (3%), es menor al margen de error de la encuesta (3.1%).
Los dos candidatos, el panista Alejandro Zapata Perogordo y el priísta Fernando Toranzo Fernández, gozan del mismo nivel de conocimiento entre la población (89%) y de similares niveles de opinión favorable.
Zapata es considerado el más capaz para gobernar la entidad, cercano a la gente e inteligente, pero la diferencia con el priísta es mínima.
Independientes
Lo que da la ventaja al PAN es que tiene una mayor base electoral (21%) que el PRI (16%). Sin embargo, los votantes que no son afines a ningún partido y que por ser mayoría pueden cambiar el sentido de la elección, podrían dar una sorpresa al PAN.
Los independientes que en abril se inclinaban por el aspirante panista (29%) antes que por el priísta (23%), ahora se inclinan en la misma proporción por ambos candidatos (32%). Este dato junto con la cantidad de votantes probables que afirman que aún pueden cambiar su voto (36%) podría derivar en una elección bastante cerrada.
La encuesta revela que 33% de los ciudadanos considera que los resultados que proporcione el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de San Luis Potosí no serán confiables.
Lo anterior se observa en la encuesta realizada por EL UNIVERSAL en viviendas del estado. Aunque la contienda se ha cerrado, si se comparan los resultados con el ejercicio de abril, la intención de voto no refleja cambios significativos.
Con los datos actuales, incluso se puede hablar de un empate técnico, dado que la diferencia entre PRI y PAN (3%), es menor al margen de error de la encuesta (3.1%).
Los dos candidatos, el panista Alejandro Zapata Perogordo y el priísta Fernando Toranzo Fernández, gozan del mismo nivel de conocimiento entre la población (89%) y de similares niveles de opinión favorable.
Zapata es considerado el más capaz para gobernar la entidad, cercano a la gente e inteligente, pero la diferencia con el priísta es mínima.
Independientes
Lo que da la ventaja al PAN es que tiene una mayor base electoral (21%) que el PRI (16%). Sin embargo, los votantes que no son afines a ningún partido y que por ser mayoría pueden cambiar el sentido de la elección, podrían dar una sorpresa al PAN.
Los independientes que en abril se inclinaban por el aspirante panista (29%) antes que por el priísta (23%), ahora se inclinan en la misma proporción por ambos candidatos (32%). Este dato junto con la cantidad de votantes probables que afirman que aún pueden cambiar su voto (36%) podría derivar en una elección bastante cerrada.
La encuesta revela que 33% de los ciudadanos considera que los resultados que proporcione el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de San Luis Potosí no serán confiables.
Carlos Ordóñez, El Universal, 22 de junio.
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