Apartir de hoy entra en vigor la nueva Ley de la Policía Federal, en la que se establecen facultades para investigar y realizar operaciones encubiertas y de usuarios simulados (infiltrados) y solicitar la intervención de comunicaciones para atacar las estructuras de las organizaciones criminales en el territorio nacional.
Para ello, la Policía Federal contará con 32 coordinaciones estatales y cinco divisiones —de inteligencia, investigación, científica, antidrogas y Fuerzas Federales— que estarán bajo el mando del Estado Mayor de la corporación.
Al respecto, el secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, se refirió a las nuevas atribuciones con las que cuenta la Policía Federal: “Ciertamente, estas atribuciones implican también una gran responsabilidad. Ante todo, la nueva Policía Federal deberá sujetar su acción a los principios de legalidad, objetividad, profesionalismo, honradez, y respeto a las garantías individuales y los derechos humanos.
“A estas importantes atribuciones legales se añaden nuevas capacidades para la generación y explotación de inteligencia”, agregó.
La Ley de la Policía Federal, aprobada el pasado 30 de abril, incorpora por primera vez la definición del concepto de “investigación para la prevención de los delitos”.
El nuevo modelo privilegia el uso de la información para generar productos de inteligencia que concentran los esfuerzos en el combate para desmantelar las redes del crimen organizado, a partir del desarrollo de estrategias y tácticas para evitar y erradicar los delitos, en lugar de sólo reaccionar ante ellos.
Asimismo, los uniformados podrán recabar información en lugares públicos, para evitar el fenómeno delictivo, mediante la utilización de medios, instrumentos y cualquier herramienta que resulte necesaria para la generación de inteligencia preventiva.
Sobre las operaciones encubiertas y de usuarios simulados para la prevención de delitos, éstas sólo podrán ser autorizadas por el Comisionado General de la Policía Federal, previo acuerdo del secretario de Seguridad Pública.
Para ello, la Policía Federal contará con 32 coordinaciones estatales y cinco divisiones —de inteligencia, investigación, científica, antidrogas y Fuerzas Federales— que estarán bajo el mando del Estado Mayor de la corporación.
Al respecto, el secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, se refirió a las nuevas atribuciones con las que cuenta la Policía Federal: “Ciertamente, estas atribuciones implican también una gran responsabilidad. Ante todo, la nueva Policía Federal deberá sujetar su acción a los principios de legalidad, objetividad, profesionalismo, honradez, y respeto a las garantías individuales y los derechos humanos.
“A estas importantes atribuciones legales se añaden nuevas capacidades para la generación y explotación de inteligencia”, agregó.
La Ley de la Policía Federal, aprobada el pasado 30 de abril, incorpora por primera vez la definición del concepto de “investigación para la prevención de los delitos”.
El nuevo modelo privilegia el uso de la información para generar productos de inteligencia que concentran los esfuerzos en el combate para desmantelar las redes del crimen organizado, a partir del desarrollo de estrategias y tácticas para evitar y erradicar los delitos, en lugar de sólo reaccionar ante ellos.
Asimismo, los uniformados podrán recabar información en lugares públicos, para evitar el fenómeno delictivo, mediante la utilización de medios, instrumentos y cualquier herramienta que resulte necesaria para la generación de inteligencia preventiva.
Sobre las operaciones encubiertas y de usuarios simulados para la prevención de delitos, éstas sólo podrán ser autorizadas por el Comisionado General de la Policía Federal, previo acuerdo del secretario de Seguridad Pública.
Rubén Mosso, Milenio, 2 de junio.
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