Legisladores de la mayoría de los partidos políticos, incluido Acción Nacional (PAN) calificaron de desafortunado el reto lanzado por el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, al cártel de La Familia. Sus declaraciones dan cuenta de un gobierno desesperado, “es la mayor calamidad que ha caído sobre el país en los pasados 50 años”, señalaron los priístas.
En el Senado de la República, Gustavo Madero, coordinador de los panistas, dijo que el tema del narcotráfico es muy delicado y “no debe haber expresiones inadecuadas en las que parecería que no se está teniendo una visión de Estado”.
Comentó que lo rescatable de la declaración de Gómez Mont es rechazar que los delincuentes ataquen a familias inocentes y que son las fuerzas de seguridad las que deben enfrentar a los criminales; sin embargo, apuntó, lo expresado por el titular de Gobernación no fue muy afortunado.
En la Cámara de Diputados, legisladores de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) destacaron un error estratégico en la forma de conducirse de Gómez Mont, porque la violencia que se podría generar es de incalculables consecuencias.
Samuel Aguilar, del PRI, y David Mendoza, del PRD, censuraron la postura asumida por el titular de Gobernación. En contraparte, Diódoro Carrasco Altamirano justificó al funcionario y sostuvo que sus dichos se basan en la existencia de una estrategia sustentada en un proyecto de combate a los delincuentes.
“La posición del gobierno es clara y contundente frente a la insinuación de la delincuencia de establecer algún tipo de diálogo y negociación. La postura del gobierno fue como debió haber sido, contundente y vigorosa, para no dejar lugar a duda de que no hay espacio para la negociación con el crimen organizado.”
Samuel Aguilar criticó la “altanería” del secretario de Gobernación; no es la mejor forma de expresarse de un hombre que carga sobre sí una importante responsabilidad política. “Yo pensé que las películas del Oeste ya se habían acabado. Me parece que no es la manera de conducirse ni de expresarse de un secretario de Gobernación. Esto es una evidencia de que el gobierno federal ha tenido una estrategia fallida y se encuentra muy desesperado. Ésta ha sido la mayor calamidad que ha caído sobre México durante los pasados 50 años”.
El coordinador de los senadores del PRI, Manlio Fabio Beltrones, advirtió que “el Estado mexicano” no debe dialogar de ninguna forma con la delincuencia organizada. Atender una conversación o un diálogo entre unos y otros no es sano para la institucionalidad, recalcó.
Por su parte, el senador del PRD Graco Ramírez calificó como una actitud bravucona la de Gómez Mont, la cual, agregó, forma parte de una estrategia equivocada en materia de combate al narcotráfico.
En el Senado de la República, Gustavo Madero, coordinador de los panistas, dijo que el tema del narcotráfico es muy delicado y “no debe haber expresiones inadecuadas en las que parecería que no se está teniendo una visión de Estado”.
Comentó que lo rescatable de la declaración de Gómez Mont es rechazar que los delincuentes ataquen a familias inocentes y que son las fuerzas de seguridad las que deben enfrentar a los criminales; sin embargo, apuntó, lo expresado por el titular de Gobernación no fue muy afortunado.
En la Cámara de Diputados, legisladores de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) destacaron un error estratégico en la forma de conducirse de Gómez Mont, porque la violencia que se podría generar es de incalculables consecuencias.
Samuel Aguilar, del PRI, y David Mendoza, del PRD, censuraron la postura asumida por el titular de Gobernación. En contraparte, Diódoro Carrasco Altamirano justificó al funcionario y sostuvo que sus dichos se basan en la existencia de una estrategia sustentada en un proyecto de combate a los delincuentes.
“La posición del gobierno es clara y contundente frente a la insinuación de la delincuencia de establecer algún tipo de diálogo y negociación. La postura del gobierno fue como debió haber sido, contundente y vigorosa, para no dejar lugar a duda de que no hay espacio para la negociación con el crimen organizado.”
Samuel Aguilar criticó la “altanería” del secretario de Gobernación; no es la mejor forma de expresarse de un hombre que carga sobre sí una importante responsabilidad política. “Yo pensé que las películas del Oeste ya se habían acabado. Me parece que no es la manera de conducirse ni de expresarse de un secretario de Gobernación. Esto es una evidencia de que el gobierno federal ha tenido una estrategia fallida y se encuentra muy desesperado. Ésta ha sido la mayor calamidad que ha caído sobre México durante los pasados 50 años”.
El coordinador de los senadores del PRI, Manlio Fabio Beltrones, advirtió que “el Estado mexicano” no debe dialogar de ninguna forma con la delincuencia organizada. Atender una conversación o un diálogo entre unos y otros no es sano para la institucionalidad, recalcó.
Por su parte, el senador del PRD Graco Ramírez calificó como una actitud bravucona la de Gómez Mont, la cual, agregó, forma parte de una estrategia equivocada en materia de combate al narcotráfico.
Roberto Garduño, Andrea Becerril y Víctor Ballinas, La Jornada, 23 de julio.
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