BOGOTÁ.- La decisión del Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de congelar relaciones con Colombia, anunciada el martes, fue vista en este país como una reacción desproporcionada, aunque algunos ex Cancilleres admitieron que al Gobierno de Álvaro Uribe también le ha faltado trabajo diplomático.
La airada reacción de Chávez se produjo luego de que Bogotá denunciara que armas suecas compradas por Venezuela hace 20 años terminaron en manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y en el marco de un polémico acuerdo que permitiría a aeronaves de Estados Unidos utilizar bases militares colombianas.
Al ser cuestionado sobre la situación, algunos ex Cancilleres valoraron que a la Administración de Uribe le hace falta trabajar en mecanismos que le permita dialogar y acordar con sus vecinos sobre temas críticos.
"Muchos han sugerido que se pudo hacer un trabajo más profundo (para evitar la congelación de las relaciones), ejercitando más la diplomacia, explicando que, en ningún caso, las bases al estilo de la Guerra Fría existen", dijo a REFORMA la ex Ministra de Relaciones Exteriores María Emma Mejía.
"Acudimos mucho a la diplomacia del micrófono, es un defecto de la diplomacia colombiana, pero también de la venezolana", añadió.
El ex Canciller Rodrigo Pardo opinó en entrevista con la televisión local que el esquema que Colombia ha seguido con Venezuela debe modificarse.
"Lo que se ha ensayado hasta ahora, que es la relación a nivel de Presidentes, que se encuentran en unas cumbres de mucha amistad y abrazos, se está agotando y no está produciendo los resultados esperados", valoró.
Y el ex jefe de la diplomacia colombiana, Fernando Araújo, pidió a Venezuela respetar las decisiones que Bogotá toma en materia de seguridad.
En un comunicado, Colombia informó que había proporcionado desde junio a su contraparte venezolana documentación sobre el desvío de armas suecas para las FARC, sin obtener respuesta.
Además de congelar las relaciones, Chávez anunció el martes el retiro de su Embajador de Bogotá, pidió sustituir las importaciones desde el país vecino y amenazó con expropiar empresas colombianas en Venezuela, lo que generó ayer la reacción de diversos dirigentes empresariales.
Por otra parte, ante el enrarecimiento del ambiente, el Canciller brasileño, Celso Amorim, abogó porque Colombia sea más transparente en lo que atañe al acuerdo militar con Estados Unidos, al tiempo que ofreció su mediación para zanjar el conflicto diplomático entre Bogotá y Caracas.
Con información de agencias
Comercio en juego
Colombia y Venezuela son socios comerciales naturales:
7,200 Millones de dólares fue el comercio entre ambas naciones en 2008.
606 Millones de dólares, se calcula, es la inversión de Colombia en Venezuela.
300 Millones de pies cúbicos de gas compra Venezuela a su vecino al día.
La airada reacción de Chávez se produjo luego de que Bogotá denunciara que armas suecas compradas por Venezuela hace 20 años terminaron en manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y en el marco de un polémico acuerdo que permitiría a aeronaves de Estados Unidos utilizar bases militares colombianas.
Al ser cuestionado sobre la situación, algunos ex Cancilleres valoraron que a la Administración de Uribe le hace falta trabajar en mecanismos que le permita dialogar y acordar con sus vecinos sobre temas críticos.
"Muchos han sugerido que se pudo hacer un trabajo más profundo (para evitar la congelación de las relaciones), ejercitando más la diplomacia, explicando que, en ningún caso, las bases al estilo de la Guerra Fría existen", dijo a REFORMA la ex Ministra de Relaciones Exteriores María Emma Mejía.
"Acudimos mucho a la diplomacia del micrófono, es un defecto de la diplomacia colombiana, pero también de la venezolana", añadió.
El ex Canciller Rodrigo Pardo opinó en entrevista con la televisión local que el esquema que Colombia ha seguido con Venezuela debe modificarse.
"Lo que se ha ensayado hasta ahora, que es la relación a nivel de Presidentes, que se encuentran en unas cumbres de mucha amistad y abrazos, se está agotando y no está produciendo los resultados esperados", valoró.
Y el ex jefe de la diplomacia colombiana, Fernando Araújo, pidió a Venezuela respetar las decisiones que Bogotá toma en materia de seguridad.
En un comunicado, Colombia informó que había proporcionado desde junio a su contraparte venezolana documentación sobre el desvío de armas suecas para las FARC, sin obtener respuesta.
Además de congelar las relaciones, Chávez anunció el martes el retiro de su Embajador de Bogotá, pidió sustituir las importaciones desde el país vecino y amenazó con expropiar empresas colombianas en Venezuela, lo que generó ayer la reacción de diversos dirigentes empresariales.
Por otra parte, ante el enrarecimiento del ambiente, el Canciller brasileño, Celso Amorim, abogó porque Colombia sea más transparente en lo que atañe al acuerdo militar con Estados Unidos, al tiempo que ofreció su mediación para zanjar el conflicto diplomático entre Bogotá y Caracas.
Con información de agencias
Comercio en juego
Colombia y Venezuela son socios comerciales naturales:
7,200 Millones de dólares fue el comercio entre ambas naciones en 2008.
606 Millones de dólares, se calcula, es la inversión de Colombia en Venezuela.
300 Millones de pies cúbicos de gas compra Venezuela a su vecino al día.
Octavio Pineda corresponsal, Reforma, 30 de julio.
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