Zar antidrogas de EU descarta cualquier negociación entre gobiernos y narcos

Ante el incremento en el consumo de drogas entre adolescentes y la difícil situación económica, que obliga a los padres de familia a trabajar y dejar solos a sus hijos, el gobierno tiene una especial responsabilidad para apoyar a la gente, advirtió Gil Kerlikowske, director de la Oficina de Políticas para el Control de Drogas de Estados Unidos.

En el segundo día de su visita a México, el funcionario resaltó que las personas debieran contar con una variedad de mecanismos que les permitan evitar que sus niños sigan el camino de la droga, aunque puntualizó que este es un problema que afecta a varios países, incluido Estados Unidos.

Durante la conferencia de prensa ofrecida en la Secretaría de Salud (Ssa), al término de la reunión entre Kerlikowske y el titular de la dependencia, José Angel Córdova Villalobos, el primero también rechazó que exista cualquier posibilidad de acuerdo entre gobiernos y narcotraficantes. Estos son criminales y terroristas, dijo.

Tampoco la legalización de las drogas es la solución a la creciente ola de violencia y adicciones. Por el contrario, el zar antidrogas estadunidense resaltó el valor con que el gobierno de Felipe Calderón ha enfrentado a los cárteles del narcotráfico.

Otro aspecto destacado por Kerlikowske es que hace años la exposición a las drogas no era tan grave.

Al respecto, el secretario Córdova Villalobos refirió uno de los resultados de la Encuesta Nacional de Adicciones 2008, con el cual se comprueba el notable incremento en el acceso de los jóvenes a las drogas. El estudio, del que sólo se han dado a conocer resultados preliminares, detectó que 19 por ciento de las personas nacidas entre 1957 y 1971 estuvieron en contacto con las drogas; para quienes nacieron en el periodo de 1972 a 1983 la oportunidad de uso fue de 18.5 por ciento. En cambio, para los nacidos de 1984 a 1993 este indicador fue de 23.3 por ciento, en promedio.

En algunos sectores, dicha exposición llega a ser de hasta 40 por ciento, apuntó.

Para Kerlikowske, el problema de las adicciones es muy complejo, para el cual no existe una respuesta fácil; sin embargo, Estados Unidos mantendrá y fortalecerá su apoyo a todos los países, “conforme la economía siga mejorando”, indicó.

Sobre el creciente consumo de drogas ilícitas en México, Córdova Villalobos rechazó que implique el fracaso de la política calderonista en la materia. Señaló que el actual nivel de consumo y exposición de los jóvenes a los estupefacientes es resultado “de una historia de varias décadas de crecimiento del problema”.

Mencionó como evidencia de los avances el aumento en el presupuesto destinado a contrarrestar la demanda. De 130 millones de pesos que se invirtieron en 2007, de 2008 a la fecha se han asignado más de mil 500 millones.

Una vez que se ha creado la infraestructura con 302 centros Nueva Vida que ya están en operación, la realización de acciones para detectar de manera oportuna a los potenciales consumidores o ya usuarios de alguna droga en las escuelas, entre otras, se empezarán a ver los resultados en la disminución de la demanda.

Insistió en no perder de vista la importancia de la oferta de drogas en esta problemática. Por eso se tiene que trabajar de manera conjunta.

Córdova Villalobos también comentó que como parte de las acciones de la Iniciativa Mérida, el sector salud obtendrá un apoyo en especie para construir un “observatorio de las adicciones”, con el que se dará seguimiento en tiempo real a las estadísticas de consultas médicas y la atención que reciben las personas que buscan tratamientos de rehabilitación en los centros Nueva Vida.

Ángeles Cruz Martínez, La Jornada, 29 de julio.