Define Colombia su futuro político

BOGOTÁ.- Los colombianos están llamados hoy a las urnas para elegir entre la continuidad en la forma de Gobierno del Presidente Álvaro Uribe, representada por el candidato oficialista Juan Manuel Santos, y la "legalidad democrática" que propone su principal rival, Antanas Mockus.

Casi 30 millones de personas están habilitadas para votar por alguno de los nueve aspirantes presidenciales inscritos.

Lo más probable, según los estudios de intención de voto, es que ninguno de los dos punteros, Mockus y Santos, alcance 50 por ciento de los votos, por lo que sería necesaria una segunda vuelta, el 20 de junio, para la que el primero parece llevar ventaja.

Más que la continuidad de las políticas de Uribe, cuyos logros en seguridad y reactivación económica han ofrecido mantener los principales candidatos, en las elecciones están en juego la forma de hacer política y el estilo de gobernar, según los expertos.

Y es que, advierten, en los casi ocho años de su gestión, los éxitos de Uribe se han visto enlodados por una serie de escándalos que el electorado podría cobrarle a su delfín político, el ex Ministro de Defensa Santos.

Entre tanto, la imagen de honestidad y estricto apego a la ley que transmite Mockus, abanderado del Partido Verde, ha calado bien entre los votantes.

El creciente apoyo que éste ha recibido en los últimos meses, aclaran los expertos, es incluso producto de ofrecer continuar las políticas del actual Mandatario, pero de forma distinta, sin trampas.

"La gente ve a Santos como la continuidad en toda la línea de las políticas de Uribe, y en Mockus, una forma distinta de hacer política y un compromiso en la lucha anticorrupción, no tanto un cambio sustancial en seguridad y economía", dijo a REFORMA el analista Rafael Nieto.

"Los colombianos no están dispuestos a votar por candidatos abiertamente opositores al Presidente, todavía muy popular", añadió. "El éxito de Mockus es que se presenta como un candidato posuribista".

Santos ha prometido dar seguimiento a la labor de la actual Administración, apretando algunas tuercas en temas como el desempleo y la pobreza, mientras que Mockus ha puesto énfasis en la educación, la cultura ciudadana y la inversión social.

Durante la gestión de Uribe, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) sufrieron los más duros golpes de su historia; delitos como el secuestro fueron abatidos, la economía se reactivó y la inversión se disparó.

Pero también surgieron escándalos, como escuchas ilegales a oídos del DAS, la central de inteligencia adscrita a la presidencia, y ejecuciones de civiles a manos de militares que los hacían pasar por guerrilleros.

En 2008, la ex congresista Yidis Medina denunció haber recibido ofrecimientos de dádivas del Gobierno a cambio de su voto para aprobar una reforma que permitió a Uribe reelegirse en 2006, y decenas de congresistas han sido investigados y encarcelados por presuntos nexos con paramilitares.

Estos casos, según los analistas, han permitido que haga eco el llamado de Mockus a una política más limpia.




Primer asalto

Se prevé que la votación de hoy sirva para definir las posiciones rumbo al balotaje.


· Nueve candidatos están inscritos.

· El oficialista Juan Manuel Santos y el independiente Antanas Mockus están empatados con cerca de 35 por ciento de la intención de voto.

· Ninguno de los otros candidatos, según los sondeos, obtendrá más de 10 por ciento de los sufragios.

· Cincuenta por ciento de los votos más uno es necesario para evitar el balotaje, el 20 de junio.

· Están habilitados 29 millones 983 mil votantes, que podrán acudir a 72 mil 725 mesas de votación.

· Unos 360 mil policías y militares resguardarán la seguridad durante la jornada electoral.
Octavio Pineda corresponsal, Reforma, 30 de mayo.

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