IFE: sin validez, el 65.50% de las “pruebas” que presentó AMLO

A  través de un informe circunstanciado que envió al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), el InstitutoFederal Electoral (IFE) pidió descartar presuntas pruebas que presentó la coalición Movimiento Progresista, por las cuales se demanda anular la elección presidencial, debido a que no están relacionadas con ese proceso electoral.

El IFE, precisó al Tribunal que muchas de esas pruebas no cumplen con la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación, por lo que no procede la petición de la referida coalición y su candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, en el sentido de anular la elección presidencial del pasado 1º de julio.

Al respecto, cabe recordar que a decir del propio López Obrador, quien impugnó los comicios presidenciales el 12 de julio pasado,  la coalición que lo postuló contaban con “miles de pruebas”, mismas que habían sido entregadas en 58 cajas, las cuales ahora ya se encuentran en poder TEPJF.

Sin embargo, cuando el IFE procedió a revisar las 6 mil 294 “pruebas” que fueron entregadas en 58 cajas, se determinó que de éstas, cuatro  mil 123, es decir 65.50 por ciento, no tenían relación alguna con la elección presidencial, sino que tenían qué ver con las elecciones de diputados, senadores e incluso gobernadores.

Por lo que se refiere a las restantes dos mil 171 pruebas, que corresponden al 34.49 por ciento del total de pruebas presentadas entregadas por la coalición, el IFE determinó que sí tenían alguna relación con la elección presidencial. Entre éstas se hallan las polémicas tarjetas de las tiendas de autoservicio Soriana y algunos otros plásticos para llamadas telefónicas con la imagen de Enrique Peña Nieto.

Al ir al fondo del asunto y examinarlas de manera detallada, se detectó que  mil 112 no cumplen con los requisitos que la referida ley establece para poder analizar pruebas confesionales y testimoniales; es decir, que éstas no fueron emitidas ni consignadas ante notario público.

La coalición Movimiento Progresista entregó 495 pruebas escritas a mano, 507 más en computadora y 108 formatos con el membrete de “escritos de incidentes”, y otros dos llamados “inconformidad ciudadana”; pero sin las formalidades que prevé el artículo 14 de la referida Ley General del Sistema de Medios de Impugnación, indispensables para ser tomadas en cuenta en el juicio electoral.

De este modo, las “pruebas” que presentan tales deficiencias, al no cumplir con los requisitos de ley previamente establecidos, no podrán ser tomadas en cuenta sino como elementos “indiciarios”.

Cabe mencionar que entre las pruebas que tiene ya en su poder el Tribunal Electoral, en las 58 cajas que entregó el Movimiento Progresista, se encuentran gorras, plumas, elementos que son propios de los procesos electorales y que no han sido tomados en cuenta como elementos probatorios de que éstos fueron para la compra de votos que ha acusado el abanderado de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador.

Los magistrados integrantes del Trife, Constancio Carrasco Daza, Flavio Galván Rivera y Salvador Nava Gomar encargados de analizar las pruebas que están en su poder –contenidas en las referidas 58 cajas—, aún no han concluido su análisis previo al dictamen de su calificación sobre los comicios, el cual deberá  ser emitido a más tardar el 6 de septiembre.

Cecilia Higuera, La Crónica, 7 de agosto.