Repudia la CNTE actos de represión

A dos días de que fuera desalojada del Zócalo, y en plena noche de Grito, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) volvió ayer a salir a las calles para protestar contra lo que consideran una represión de Estado.

El magisterio disidente de Oaxaca, Michoacán, DF y Veracruz marchó de la Estela de Luz al Monumento a la Revolución, acompañado de cientos de jóvenes universitarios e integrantes de organizaciones disímbolas como #YoSoy132, el SME y Morena, entre ellos el escritor Paco Ignacio Taibo II.

"Queremos dejar muy patente el repudio de la agresión del Gobierno federal; queremos decirle al Gobierno con esta manifestación que no hemos de aceptar de ninguna manera la imposición de la reforma educativa", expresó el profesor Rubén Núñez.

El dirigente de la sección 22 de Oaxaca encabezó la marcha junto con el secretario de la organización de dicha sección, Francisco Villalobos. Más tarde se incorporó, aunque no a la vanguardia, el secretario de la sección 18 de Michoacán, Juan José Ortega.

Durante la llamada "marcha contra la represión y el desalojo", que inició a las 17:45 y concluyó pasadas las 20:00 horas, la CNTE formó cadenas humanas para evitar mezclarse con estudiantes y otras organizaciones.

"No queremos infiltrados en nuestro movimiento, no aceptamos capuchas o rostros cubiertos, nosotros somos pacíficos", advertían mediante altavoces en distintos puntos de la columna.

Al llegar al cruce de Paseo de la Reforma y Juárez, la vanguardia amagó con cambiar de ruta y avanzar al Zócalo, lugar del que fueron desalojados el viernes y donde ya se alistaba el tradicional Grito de Independencia.

"Zócalo, Zócalo", comenzó a gritar un contingente del magisterio oaxaqueño, que por acuerdo de la propia Coordinadora avanzó al frente de la marcha.

La marcha hizo una pausa frente a la Torre del Caballito, mientras Núñez consultaba a otros dirigentes sobre la viabilidad de avanzar rumbo a la Plaza de la Constitución.

Al final, la ruta se mantuvo -por motivos logísticos y de seguridad- por lo que los distintos contingentes llegaron al Monumento a la Revolución, donde Núñez advirtió que la CNTE no se irá de la Ciudad de México sino hasta que el Presidente Enrique Peña Nieto resuelva sus demandas.

"Vamos a permanecer en la Plaza de la Constitución, vamos a permanecer en el Zócalo, vamos a permanecer en el Monumento a la Revolución hasta que Peña Nieto y sus espurios nos resuelvan el problema de la reforma educativa", sostuvo.

En un improvisado mitin, el profesor afirmó que a pesar de la represión del Estado -en alusión al desalojo del viernes- el movimiento magisterial está más vigente que nunca.

A las 23:20 horas, después de que se cumplió un programa artístico con música y baile, Rubén Núñez gritó cuatro veces "que viva México" antes de lanzar un "que viva la CNTE".

Desde un templete instalado en la zona norte de la Plaza de la República, Núñez explicó previamente que el grito de la CNTE es de insurgencia magisterial, de resistencia y desobediencia civil a la reforma educativa.

"Al pueblo de México, de Oaxaca para México y de México para el mundo, que sea el grito de resistencia de la CNTE, de la insurgencia, de la desobediencia civil en contra de la imposición del gobierno de nuestro País", dijo.

Antonio Baranda, Reforma, 16 de septiembre.