Funcionarios que participan en el gabinete de seguridad nacional señalaron que los órganos de inteligencia del país han tomado conocimiento de amenazas sobre posibles ataques contra instalaciones federales y autoridades, debido a que en acciones contra el crimen organizado han sido detenidos familiares de narcotraficantes.
Tras la aparición de narcomantas en 20 entidades de la República, con mensajes como “Sr. presidente Felipe Calderón estamos concientes de nuestros actos y en desacuerdo que involucren a nuestros hermanos, padres e hijos”, grupos del crimen organizado han hecho llegar avisos en los que amenazan con atacar dependencias, entre ellas las secretarías de la Defensa Nacional, Gobernación y Seguridad Pública (SSP) federal, así como la Procuraduría General de la República. De igual forma, a altos mandos de éstas si el gobierno federal no modifica su política de “apresar gente inocente”, señalaron los funcionarios entrevistados.
Según los narcomensajes, “la familia es intocable y sagrada”, pero luego de que en diversas fiestas han sido detenidas familias enteras, los grupos del crimen organizado han señalado que Genaro García Luna, titular de la SSP federal, Luis Cárdenas Palomino y Armando Espinoza Benítez, funcionarios cercanos al secretario, han incurrido en abusos de autoridad.
Sin embargo, Cárdenas Palomino, encargado del área de inteligencia para la prevención en la SSP federal, declaró que los miembros del hampa están “mal informados”, pues no se dedica a combatir cuestiones ligadas con el tráfico de estupefacientes, sino de secuestro.
Según las fuentes consultadas, las notas que han hecho llegar los delincuentes a diversas instancias gubernamentales afirman que las organizaciones no han sido combatidas de manera igualitaria y que se ataca de manera ilegal a los familiares de los capos.
Se debe recordar que en marzo de este año, en el salón Eventos Mezanine, ubicado sobre el bulevar Insurgentes, en el fraccionamiento Los Álamos, en Tijuana, Baja California, fueron detenidas 58 personas, entre ellas 26 que fueron identificadas como integrantes del crimen organizado y al servicio de Teodoro García Simental, El Teo, líder del cártel de Sinaloa en la ciudad de Tijuana.
En abril pasado, en Morelia, Michoacán, fueron arrestadas 60 personas, supuestamente vinculadas con el cártel de La Familia, durante un bautizo que se llevaba a cabo en el salón de fiestas Mesón Tarasco, ubicado en el kilómetro siete de la antigua carretera Morelia-Guadalajara, en el tramo que lleva a la población de Quiroga.
Asimismo, en días pasados en Cuernavaca, Morelos, fueron aprehendidos 14 presuntos integrantes del cártel de los hermanos Beltrán Leyva, entre ellos tres personas de la tercera edad que fueron identificados como operadores de esa organización criminal y que actualmente se encuentran bajo arraigo.
Tras la aparición de narcomantas en 20 entidades de la República, con mensajes como “Sr. presidente Felipe Calderón estamos concientes de nuestros actos y en desacuerdo que involucren a nuestros hermanos, padres e hijos”, grupos del crimen organizado han hecho llegar avisos en los que amenazan con atacar dependencias, entre ellas las secretarías de la Defensa Nacional, Gobernación y Seguridad Pública (SSP) federal, así como la Procuraduría General de la República. De igual forma, a altos mandos de éstas si el gobierno federal no modifica su política de “apresar gente inocente”, señalaron los funcionarios entrevistados.
Según los narcomensajes, “la familia es intocable y sagrada”, pero luego de que en diversas fiestas han sido detenidas familias enteras, los grupos del crimen organizado han señalado que Genaro García Luna, titular de la SSP federal, Luis Cárdenas Palomino y Armando Espinoza Benítez, funcionarios cercanos al secretario, han incurrido en abusos de autoridad.
Sin embargo, Cárdenas Palomino, encargado del área de inteligencia para la prevención en la SSP federal, declaró que los miembros del hampa están “mal informados”, pues no se dedica a combatir cuestiones ligadas con el tráfico de estupefacientes, sino de secuestro.
Según las fuentes consultadas, las notas que han hecho llegar los delincuentes a diversas instancias gubernamentales afirman que las organizaciones no han sido combatidas de manera igualitaria y que se ataca de manera ilegal a los familiares de los capos.
Se debe recordar que en marzo de este año, en el salón Eventos Mezanine, ubicado sobre el bulevar Insurgentes, en el fraccionamiento Los Álamos, en Tijuana, Baja California, fueron detenidas 58 personas, entre ellas 26 que fueron identificadas como integrantes del crimen organizado y al servicio de Teodoro García Simental, El Teo, líder del cártel de Sinaloa en la ciudad de Tijuana.
En abril pasado, en Morelia, Michoacán, fueron arrestadas 60 personas, supuestamente vinculadas con el cártel de La Familia, durante un bautizo que se llevaba a cabo en el salón de fiestas Mesón Tarasco, ubicado en el kilómetro siete de la antigua carretera Morelia-Guadalajara, en el tramo que lleva a la población de Quiroga.
Asimismo, en días pasados en Cuernavaca, Morelos, fueron aprehendidos 14 presuntos integrantes del cártel de los hermanos Beltrán Leyva, entre ellos tres personas de la tercera edad que fueron identificados como operadores de esa organización criminal y que actualmente se encuentran bajo arraigo.
Gustavo Castillo García, La Jornada, 17 de mayo.
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