El embajador de Cuba en México, Manuel Aguilera de la Paz, acusó a la “ultraderecha mexicana” de intentar que el Senado se sumara a la campaña mediática internacional contra la isla.
Al referirse a la frustrada resolución del órgano legislativo, que instaba a las autoridades cubanas a garantizar “la integridad y dignidad de los presos políticos”, el diplomático consideró: “Se trató de una maniobra de la ultraderecha, que pretendió sumar al Senado, que siempre ha sido solidario con Cuba, a esta infame campaña de descrédito contra nuestro país desatada por el imperio, como parte de la guerra sucia”.
A mediados de abril, el pleno senatorial desechó en una votación cerrada el exhorto al gobierno de Raúl Castro, luego de un intenso debate motivado por el mismo embajador Aguilera de la Paz, quien semanas antes —el 3 de marzo— envió una carta a los legisladores en la que pidió frenar el dictamen, so riesgo de lesionar la relación bilateral.
Ayer, al encabezar en la sede diplomática un acto en apoyo de cinco cubanos presos en Estados Unidos acusados de espionaje, Aguilera de la Paz confió en que fracasarán quienes mantienen una guerra mediática contra Cuba, la cual no será la primera ni la última que enfrente su país y que forma parte de la guerra sucia que, segun él, se promueve desde la Casa Blanca.
Manifestó que los denominados “presos politicos cubanos” son, en realidad, “mercenarios pagados por el imperio”.
Esas personas, añadió, “supuestos héroes y supuestos líderes”, carecen de respaldo popular en Cuba y han sido convertidos en figuras públicas gracias a “los magos de la desinformacion en el mundo”, entre los cuales también incluyó a los medios mexicanos.
Al referirse a la frustrada resolución del órgano legislativo, que instaba a las autoridades cubanas a garantizar “la integridad y dignidad de los presos políticos”, el diplomático consideró: “Se trató de una maniobra de la ultraderecha, que pretendió sumar al Senado, que siempre ha sido solidario con Cuba, a esta infame campaña de descrédito contra nuestro país desatada por el imperio, como parte de la guerra sucia”.
A mediados de abril, el pleno senatorial desechó en una votación cerrada el exhorto al gobierno de Raúl Castro, luego de un intenso debate motivado por el mismo embajador Aguilera de la Paz, quien semanas antes —el 3 de marzo— envió una carta a los legisladores en la que pidió frenar el dictamen, so riesgo de lesionar la relación bilateral.
Ayer, al encabezar en la sede diplomática un acto en apoyo de cinco cubanos presos en Estados Unidos acusados de espionaje, Aguilera de la Paz confió en que fracasarán quienes mantienen una guerra mediática contra Cuba, la cual no será la primera ni la última que enfrente su país y que forma parte de la guerra sucia que, segun él, se promueve desde la Casa Blanca.
Manifestó que los denominados “presos politicos cubanos” son, en realidad, “mercenarios pagados por el imperio”.
Esas personas, añadió, “supuestos héroes y supuestos líderes”, carecen de respaldo popular en Cuba y han sido convertidos en figuras públicas gracias a “los magos de la desinformacion en el mundo”, entre los cuales también incluyó a los medios mexicanos.
Milenio, 6 de mayo.
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